Una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza acaba de fallar en contra del Plan Xeral de la ciudad, concretamente en el área de reparto 27-E. Allí se contemplaba la obtención de suelo para una plaza pública en la calle Reza, algo que el Alto Tribunal gallego sólo permite a través de expropiación. La edil de Urbanismo, Áurea Soto, valora su coste entre cinco y 12 millones de euros, por lo que considera inasumible esta opción y estudia la posibilidad de modificar puntualmente el Plan Xeral que heredamos, dice.
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha dictado una sentencia contra el planeamiento de la ciudad en su área de reparto 27-E, en la Praza Padre Feijóo (calle Reza), aunque vinculada a la entrada de la Finca Mariñamansa. Estaba prevista la obtención del terreno por la fórmula de compensación pero la decisión del tribunal no deja otra opción, señalan en el Concello, que recurrir a una expropiación para lograr el suelo, algo que se considera inasumible.
Se da la circunstancia de que en el Plan Xeral de Ordenación Municipal se contemplaba el uso de esta zona como plaza pública, por lo que en el año 2004 el Concello aprobó un expediente de ocupación anticipada para comenzar a intervenir en este área, donde en sus cerca de 800 metros cuadrados existen varias casas en estado de ruina.
La solución pasa ahora, según matiza la edil de Urbanismo, Áurea Soto, por modificar el Plan Xeral de forma puntual en la zona, ya que el TSXG no aceptó su clasificación como área de reparto, como estaba catalogada en el planeamiento vigente.
Problema añadido
Esto se convierte en un problema añadido, según Áurea Soto, teniendo en cuenta que sólo se puede optar a intervenir en este terreno a través de expropiación, según ha fallado el TSXG, pues debe ser valorada de nuevo su edificabilidad y estaríamos hablando de miles de millones de pesetas, concreta mente entre cinco y 12 millones de euros, matiza la concejala. De hecho, sostiene que si el Concello tuviese que hacerse cargo de este modo de las resoluciones en contra del planeamiento (es decir, expropiando), se tendrían que destinar la totalidad de los ingresos municipales de los próximos diez años, algo que considera totalmente inasumible.
La responsable municipal de Urbanismo sostiene que éste es otro de los problemas arrastrados de la gestión del anterior gobierno del PP, que cuando redactó el Plan Xeral calificó mal estos terrenos, provocando ahora el rechazo del Tribunal Superior de Xustiza. De este modo, Áurea Soto subraya que ahora mismo, esa parcela no se puede utilizar, por lo que no nos queda otro remedio más que estudiarlo dentro de las posibilidades que tengamos con el Plan Xeral que está vigente, algo que hemos heredado y que tendremos que gestionar de la mejor manera posible. La gestión de esta zona en concreto estaría incluida dentro de las futuras modificaciones urbanísticas para integrar el AVE y el termalismo, los dos grandes proyectos estratégicos de la ciudad, adelanta la concejala.
Aunque el Concello recurrirá ante el Tribunal Supremo esta decisión judicial, Áurea Soto matiza que este fallo judicial es una muestra más de las deficiencias del actual planeamiento. Y aunque de los más de 20 recursos presentados a la totalidad del PXOM aún carecen de veredicto en los tribunales, estas sentencias puntuales son indicativas de que tendremos que ir puliendo el planeamiento según vayan dictando los jueces, concluye.
Se da la circunstancia de que en el Plan Xeral de Ordenación Municipal se contemplaba el uso de esta zona como plaza pública, por lo que en el año 2004 el Concello aprobó un expediente de ocupación anticipada para comenzar a intervenir en este área, donde en sus cerca de 800 metros cuadrados existen varias casas en estado de ruina.
La solución pasa ahora, según matiza la edil de Urbanismo, Áurea Soto, por modificar el Plan Xeral de forma puntual en la zona, ya que el TSXG no aceptó su clasificación como área de reparto, como estaba catalogada en el planeamiento vigente.
Problema añadido
Esto se convierte en un problema añadido, según Áurea Soto, teniendo en cuenta que sólo se puede optar a intervenir en este terreno a través de expropiación, según ha fallado el TSXG, pues debe ser valorada de nuevo su edificabilidad y estaríamos hablando de miles de millones de pesetas, concreta mente entre cinco y 12 millones de euros, matiza la concejala. De hecho, sostiene que si el Concello tuviese que hacerse cargo de este modo de las resoluciones en contra del planeamiento (es decir, expropiando), se tendrían que destinar la totalidad de los ingresos municipales de los próximos diez años, algo que considera totalmente inasumible.
La responsable municipal de Urbanismo sostiene que éste es otro de los problemas arrastrados de la gestión del anterior gobierno del PP, que cuando redactó el Plan Xeral calificó mal estos terrenos, provocando ahora el rechazo del Tribunal Superior de Xustiza. De este modo, Áurea Soto subraya que ahora mismo, esa parcela no se puede utilizar, por lo que no nos queda otro remedio más que estudiarlo dentro de las posibilidades que tengamos con el Plan Xeral que está vigente, algo que hemos heredado y que tendremos que gestionar de la mejor manera posible. La gestión de esta zona en concreto estaría incluida dentro de las futuras modificaciones urbanísticas para integrar el AVE y el termalismo, los dos grandes proyectos estratégicos de la ciudad, adelanta la concejala.
Aunque el Concello recurrirá ante el Tribunal Supremo esta decisión judicial, Áurea Soto matiza que este fallo judicial es una muestra más de las deficiencias del actual planeamiento. Y aunque de los más de 20 recursos presentados a la totalidad del PXOM aún carecen de veredicto en los tribunales, estas sentencias puntuales son indicativas de que tendremos que ir puliendo el planeamiento según vayan dictando los jueces, concluye.
