El transporte metropolitano está más cerca de convertirse en realidad. El director xeral de Mobilidade, Miguel Rodríguez Bugarín, se reunió ayer con los representantes de los ocho concellos implicados (Ourense, Amoeiro, Barbadás, Coles, Pereiro de Aguiar, Punxín, San Cibrao y Toén) para presentar el texto del convenio que dará lugar a la creación del área de transporte metropolitano.
Las previsiones indican que comenzará funcionar en el tercer trimestre del año, dado que los concellos tienen una semana de plazo para revisar el convenio (por posibles errores) y hasta el 15 de mayo para aprobarlo en pleno, antes de que el Consello de la Xunta dé el visto bueno definitivo, previo a la firma del convenio, que podría producirse en verano.
A pesar de este avance, la ubicación exacta de los intercambiadores en la ciudad está todavía en fase de negociación entre la Xunta y el Concello, que ya los daba por ultimados hace una semana, aunque ambas partes están de acuerdo en que se sitúen en el entorno de la Comisaría de Policía, en As Lagoas (posiblemente más cerca de la misma que el actual), de la Praza de Abastos (entre la avenida de Portugal y la zona del Barbaña) y en Mariñamansa (esta ubicación es en la que hay más discrepancia ya que el Concello es partidario de ubicar el intercambiador cerca de la glorieta de Mariñamansa y la Xunta, más hacia el centro).
La aplicación del nuevo plan pretende que en el año 2015 el número de desplazamientos anuales alcance los 8,8 millones, frente a los 6,9 millones (un 4,2% menos que en la actualidad) que se producirían si no se realizase ninguna actuación y teniendo en cuenta la pérdida de competitividad anual del transporte colectivo en la actualidad. Por lo tanto, la Dirección Xeral de Mobilidade prevé incrementar en un 28% la utilización del transporte público.
Este servicio tiene una población beneficiaria de más de 135.000 habitantes, que verán mejoradas sus posibilidades de movilidad tanto entre los municipios del área como dentro de cada concello. El convenio entre la Xunta y las entidades locales implicará una inversión en promoción y mejora de la red de transporte de 6,5 millones de euros entre 2010 y 2015. De ellos, 5,3 millones serán aportados por la Xunta y el resto por los concellos.
Seguimiento
Paralelamente a estas cuestiones, se estudian también los aspectos concretos del funcionamiento de este transporte, que será asumido por las empresas concesionarias actuales, con las que ya se está trabajando para abordar los detalles técnicos, según explicaba ayer el delegado de la Xunta en Ourense, Rogelio Martínez. A su juicio, este nuevo servicio potenciará notablemente el uso del autobús e irá mejorando a lo largo del tiempo. 'No convenio xa se recollerá a creación dunha comisión para ver como funciona o servizo, se as liñas son suficientes ou é preciso aumentalas. É dicir, vai quedar aberto a modificacións posteriores', señaló Martínez.
Mobilidade pondrá en marcha la targeta TMG (Transporte metropolitano de Galicia), única para todas las áreas, que establecerá importantes descuentos con el objetivo de conseguir un equilibrio en la política social y evitar posibles usos fraudulentos. Según explicaba ayer este departamento, los descuentos se corresponderán al acuerdo entre todos los concellos y dentro de las posibilidades presupuestarias pero reservando la gratuidad total para perfiles 'cunha fonda necesidade social'. En Galicia, se prevén 126 millones de desplazamientos al año.
Trasbordos gratuitos con los autobuses urbanos
Los viajeros que lleguen a la ciudad desde alguno de los concellos implicados en el área de transporte metropolitano podrán realizar transbordos en los autobuses urbanos de forma gratuita durante un periodo de tiempo de una hora (tal y como sucede en el servicio urbano).
La tarjeta electrónica que habrá en toda Galicia tendrá un coste de 0,73 euros el viaje. A los usuarios que compren más de 40 desplazamientos, el precio por cada uno de ellos bajará hasta los 0,61 euros.
El objetivo tanto de la Xunta como de los concellos es que estos viajeros que se desplacen entre los distintos municipios dispongan de la mayor accesibilidad posible y de un grado adecuado de intermodalidad. Según la Xunta, también se están analizando las paradas intermedias en los corredores a lo largo de su recorrido por la ciudad.
La implantación del transporte metropolitano viene precedida de una polémica inicial sobre la ubicación de los intercambiadores en la ciudad, dado que la Xunta pretendía que estuviesen en Juan XXIII y la Alameda, a lo que se oponía el Concello por considerar que colapsaría el tráfico.
Una normativa de tráfico potenciará las bicicletas
El fomento del transporte colectivo en el área metropolitana de la ciudad coincidirá con cambios en la ordenanza de tráfico antes del verano, que también tendrán como objetivo que el peatón y medios de transporte sostenibles como la bicicleta, ganen protagonismo en la ciudad. Según explicaba ayer el concejal de Tráfico, Fernando Varela, la intención municipal es que las paradas de autobuses urbanos 'sexan exclusivas para este tipo de transporte', a pesar de que la Xunta explicaba ayer que se están analizando también las 'paradas intermedias dos corredores ó longo da cidade'.
Al margen del transporte metropolitano, Varela explica que se 'concederá preferencia ós peóns e ás bicicletas en certas rúas e incluso se recollerá un rexistro de bicicletas do concello para controlar as perdas e os roubos'.
Esta convivencia entre bicis y peatones se recogerá en los paseos termales, en los que en alguna ocasión ha habido tensión entre peatones y ciclistas por compartir espacios. No obstante, la prioridad será siempre de los peatones.
La nueva norma pretende, asimismo, ampliar los aparcamientos de zona ORA (la ciudad perdió cerca de 300 estacionamientos de este tipo en los últimos meses por las obras de humanización llevadas a cabo en distintas zonas) y también recogerá la posibilidad de que los vehículos particulares puedan estacionar en carga y descarga tanto al mediodía como a las noches. Además, ampliará los límites de tonelaje permitidos para el transporte de mercancías, pasando de los cinco actuales a los 12, con autorización expresa y de carácter anual.
A pesar de este avance, la ubicación exacta de los intercambiadores en la ciudad está todavía en fase de negociación entre la Xunta y el Concello, que ya los daba por ultimados hace una semana, aunque ambas partes están de acuerdo en que se sitúen en el entorno de la Comisaría de Policía, en As Lagoas (posiblemente más cerca de la misma que el actual), de la Praza de Abastos (entre la avenida de Portugal y la zona del Barbaña) y en Mariñamansa (esta ubicación es en la que hay más discrepancia ya que el Concello es partidario de ubicar el intercambiador cerca de la glorieta de Mariñamansa y la Xunta, más hacia el centro).
La aplicación del nuevo plan pretende que en el año 2015 el número de desplazamientos anuales alcance los 8,8 millones, frente a los 6,9 millones (un 4,2% menos que en la actualidad) que se producirían si no se realizase ninguna actuación y teniendo en cuenta la pérdida de competitividad anual del transporte colectivo en la actualidad. Por lo tanto, la Dirección Xeral de Mobilidade prevé incrementar en un 28% la utilización del transporte público.
Este servicio tiene una población beneficiaria de más de 135.000 habitantes, que verán mejoradas sus posibilidades de movilidad tanto entre los municipios del área como dentro de cada concello. El convenio entre la Xunta y las entidades locales implicará una inversión en promoción y mejora de la red de transporte de 6,5 millones de euros entre 2010 y 2015. De ellos, 5,3 millones serán aportados por la Xunta y el resto por los concellos.
Seguimiento
Paralelamente a estas cuestiones, se estudian también los aspectos concretos del funcionamiento de este transporte, que será asumido por las empresas concesionarias actuales, con las que ya se está trabajando para abordar los detalles técnicos, según explicaba ayer el delegado de la Xunta en Ourense, Rogelio Martínez. A su juicio, este nuevo servicio potenciará notablemente el uso del autobús e irá mejorando a lo largo del tiempo. 'No convenio xa se recollerá a creación dunha comisión para ver como funciona o servizo, se as liñas son suficientes ou é preciso aumentalas. É dicir, vai quedar aberto a modificacións posteriores', señaló Martínez.
Mobilidade pondrá en marcha la targeta TMG (Transporte metropolitano de Galicia), única para todas las áreas, que establecerá importantes descuentos con el objetivo de conseguir un equilibrio en la política social y evitar posibles usos fraudulentos. Según explicaba ayer este departamento, los descuentos se corresponderán al acuerdo entre todos los concellos y dentro de las posibilidades presupuestarias pero reservando la gratuidad total para perfiles 'cunha fonda necesidade social'. En Galicia, se prevén 126 millones de desplazamientos al año.
Trasbordos gratuitos con los autobuses urbanos
Los viajeros que lleguen a la ciudad desde alguno de los concellos implicados en el área de transporte metropolitano podrán realizar transbordos en los autobuses urbanos de forma gratuita durante un periodo de tiempo de una hora (tal y como sucede en el servicio urbano).
La tarjeta electrónica que habrá en toda Galicia tendrá un coste de 0,73 euros el viaje. A los usuarios que compren más de 40 desplazamientos, el precio por cada uno de ellos bajará hasta los 0,61 euros.
El objetivo tanto de la Xunta como de los concellos es que estos viajeros que se desplacen entre los distintos municipios dispongan de la mayor accesibilidad posible y de un grado adecuado de intermodalidad. Según la Xunta, también se están analizando las paradas intermedias en los corredores a lo largo de su recorrido por la ciudad.
La implantación del transporte metropolitano viene precedida de una polémica inicial sobre la ubicación de los intercambiadores en la ciudad, dado que la Xunta pretendía que estuviesen en Juan XXIII y la Alameda, a lo que se oponía el Concello por considerar que colapsaría el tráfico.
Una normativa de tráfico potenciará las bicicletas
El fomento del transporte colectivo en el área metropolitana de la ciudad coincidirá con cambios en la ordenanza de tráfico antes del verano, que también tendrán como objetivo que el peatón y medios de transporte sostenibles como la bicicleta, ganen protagonismo en la ciudad. Según explicaba ayer el concejal de Tráfico, Fernando Varela, la intención municipal es que las paradas de autobuses urbanos 'sexan exclusivas para este tipo de transporte', a pesar de que la Xunta explicaba ayer que se están analizando también las 'paradas intermedias dos corredores ó longo da cidade'.
Al margen del transporte metropolitano, Varela explica que se 'concederá preferencia ós peóns e ás bicicletas en certas rúas e incluso se recollerá un rexistro de bicicletas do concello para controlar as perdas e os roubos'.
Esta convivencia entre bicis y peatones se recogerá en los paseos termales, en los que en alguna ocasión ha habido tensión entre peatones y ciclistas por compartir espacios. No obstante, la prioridad será siempre de los peatones.
La nueva norma pretende, asimismo, ampliar los aparcamientos de zona ORA (la ciudad perdió cerca de 300 estacionamientos de este tipo en los últimos meses por las obras de humanización llevadas a cabo en distintas zonas) y también recogerá la posibilidad de que los vehículos particulares puedan estacionar en carga y descarga tanto al mediodía como a las noches. Además, ampliará los límites de tonelaje permitidos para el transporte de mercancías, pasando de los cinco actuales a los 12, con autorización expresa y de carácter anual.
