La Oficina municipal de información al consumidor y los expertos de Unión Fenosa e Industria informaron ayer a los ourensanos sobre la desaparición de la tarifa nocturna y el cambio por el sistema de discriminación horaria, más costosa. Fue en una multitudinaria reunión donde se produjeron numerosas protestas.
El salón de actos del centro de desenvolvemento de Caixanova (en la avenida de Pontevedra) de Ourense se quedó pequeño para acoger a decenas de usuarios de la tarifa nocturna, que iban a ser informados de la sustitución de esta fórmula por la discriminación horaria, más costosa. Acudía a dar explicaciones, entre otros, el director comercial de Unión Fenosa, Manuel Arrieta, que aconsejó a los ourensanos recurrir a empresas de instaladores para renovar los acumuladores de calor o la instalación eléctrica de la vivienda.
Arrieta fue uno de los participantes en la mesa redonda abierta junto con representantes de la Unión de Consumidores de Galicia, del Instituto de Energía de Galicia y de empresas instaladoras, ante más de 300 personas que abarrotaron el recinto y que no ocultaron su malestar por los cambios que se producirán.
Según el representante de la eléctrica, la luz en España sale muy barata a los usuarios y eso genera un déficit tarifario estimado por el Gobierno en 750 millones de euros y que sólo se reduciría al nivel del resto de Europa si el día 1 de julio se incrementa la tarifa de la luz en un 20 o un 25 por ciento.
Pero, dijo, si racionalizamos la instalación y el consumo según el horario, podemos conseguir que la factura final no suba más que un 10 o un 12 por ciento; pero si no haces nada, el recibo se puede disparar.
Mientras, el representante de los consumidores de Galicia, Miguel López, tiene claro que la factura de la luz subirá, aunque sólo 15 euros al año si se racionaliza el consumo.
Arrieta fue uno de los participantes en la mesa redonda abierta junto con representantes de la Unión de Consumidores de Galicia, del Instituto de Energía de Galicia y de empresas instaladoras, ante más de 300 personas que abarrotaron el recinto y que no ocultaron su malestar por los cambios que se producirán.
Según el representante de la eléctrica, la luz en España sale muy barata a los usuarios y eso genera un déficit tarifario estimado por el Gobierno en 750 millones de euros y que sólo se reduciría al nivel del resto de Europa si el día 1 de julio se incrementa la tarifa de la luz en un 20 o un 25 por ciento.
Pero, dijo, si racionalizamos la instalación y el consumo según el horario, podemos conseguir que la factura final no suba más que un 10 o un 12 por ciento; pero si no haces nada, el recibo se puede disparar.
Mientras, el representante de los consumidores de Galicia, Miguel López, tiene claro que la factura de la luz subirá, aunque sólo 15 euros al año si se racionaliza el consumo.
