Un recital poético-musical y el descubrimiento de una placa en el pabellón centraron el emotivo acto

Xunqueira recuerda a Celtia y a Eva en un sentido homenaje

Marián, madre de Celtia, y Montse, madre de Eva, descubren la placa con sus nombres en el pabellón. (Foto: MIGUEL ÁNGEL)
La colegiata de Xunqueira de Ambía se quedó pequeña para acoger el acto de homenaje ofrecido por el pueblo a Celtia Uxía Cabido Prado (21 años) y Eva Pérez Seara (24), las jóvenes fallecidas en el accidente del tren Alvia del pasado 24 de julio en Santiago.
El acto, que contó con la presencia del presidente de la Diputación, Manuel Baltar, dio comienzo a las siete de la tarde ante un auditorio emocionado y arrancó con unas palabras de Carmen Limia -mujer del alcalde Xunqueira de Ambía, José Luis Gavilanes, y estrecha amiga de los padres de las dos fallecidas-, que tras recordar su carácter 'alegre' y 'os seus paseos polo pobo saudando', además de 'sus gañas de crecer como personas e como profesionais do que lles gustaba', destacó que 'hoxe -por ayer-, o pobo de Xunqueira e os seus amigos pretendemos ser mínimamente xustos con elas' y puntualizó que 'elas non deixarían a ninguén de nós veniros abaixo'.

Las palabras de Carmen Limia fueron seguidas de la interpretación de la cantata 202 de Bach -que lleva el título de 'Lo que me hace sentir bien'- por parte de la organista Marisol Mendive y la soprano Elduara Perianes.

Un poema escrito por Javier González, del Círculo Poético Ourensano, con el título de 'Ángeles robados', recordó a Eva y Celtia, recitado por María González Méndez. Un pergamino con estos mismos versos les era entregado posteriormente a los padres de las homenajeadas, que quisieron expresar su gratitud 'a la Corporación de Xunqueira' y 'a vecinos y amigos', con un escrito que se cerraba con unas palabras de Gabriel García Márquez: 'La memoria del corazón elimina los malos recuerdos y magnifica los buenos'.

Padres y familiares de las fallecidas, así como los vecinos reunidos en la Colegiata, se trasladaron, tras rezar una oración en recuerdo de Eva y Celtia, al pabellón de deportes de la localidad, donde las madres de las niñas, Montse y Marián, descubrieron una placa en la entrada del recinto, que llevará el nombre de las homenajeadas a partir de ahora. Fue el momento en que las madres no pudieron evitar por más tiempo romper a llorar, apoyadas por familiares y amigos.

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