"EL SOCIALISTA MÁS VIEJO DE LEÓN"

Un candidato socialista de 99 años

candidato--575x323
photo_camera Antonio Fernández.

Dos dictaduras, tres reyes, la II República y la Guerra Civil ha visto en sus 99 años de vida Antonio Fernández, candidato del PSOE a las Cortes de Castilla y León

Dos dictaduras (Miguel Primo de Rivera y Franco), tres reyes (Alfonso XIII, Juan Carlos I y Felipe VI), la II República y la Guerra Civil ha visto en sus 99 años de vida Antonio Fernández, candidato del PSOE a las Cortes de Castilla y León, quien ha declarado que "no está el campo para la fiesta de Podemos".

Este veterano político, excombatiente de la Guerra Civil y que asentó al PSOE en su localidad de origen, Toral de los Vados (León), fue también promotor de la organización de la UGT en la comarca del Bierzo, y aún goza de una memoria envidiable y de una vitalidad anormal para los años que cuenta.

El socialista "más viejo de León", regresa ahora a la actualidad política al ocupar, de forma testimonial y más como un homenaje a su trayectoria en el partido, el penúltimo lugar en la lista (número trece) de la lista del PSOE a las Cortes de Castilla y León por la provincia leonesa.

"El caso es que yo creo que no debería de ir porque los años pesan. Pero yo estoy a las órdenes del partido", contesta solícito en una entrevista con Efe, en la que reconoce que, como va "casi el último" en la candidatura, "no va a haber problema alguno".

Antonio Fernández reside en Ponferrada con su hija, maestra "sin ejercer", y habla con orgullo de sus dos nietos, ambos varones y ya en la treintena, que "son ingenieros".

Pero eso sí, casi a diario visita Toral de los Vados, donde tiene "muchas tertulias de política" con los parroquianos del café, quienes ven que él tiene "razón", ironiza.

"Si alguien ha hecho algo por la clase trabajadora son los partidos de izquierda. Antes las mujeres no podían votar, no podían abortar, no te podías divorciar y el cincuenta por ciento de la gente era analfabeta. Ahora estamos yendo treinta años para atrás. No hemos sido listos a la hora de saber a quién votar", lamenta.

Allí también juega partidas de cartas, al subastado, que "es una cosa bastante tramposa", pero que le ayuda a mantener una habilidad mental fuera de lo común para su edad.

"Como tienes que llevar las cuentas de las cartas, hay que hacer memoria. Si estoy cuatro o cinco días sin ir, se nota en la cabeza", confiesa, a la vez que recuerda con cierta nostalgia cuando no dependía de nadie y conducía de Ponferrada a Toral de los Vados un viejo Land Rover.

Allí tiene un pequeño huerto con "tomates y pimientos" que hace las veces de "gimnasio" y que le sirve también para pensar en su pasión, la política.

"En el PSOE estamos regular", admite, pero considera que "las cosas están cambiando" y se muestra convencido de que Pedro Sánchez, su secretario general y candidato a la Presidencia del Gobierno, "va a ganar" porque le ve "bien" y, de hecho, le votó en las primarias, aunque admite que le "cae bien" el "chico de IU".

Antonio Fernández sostiene la filosofía de que los partidos de izquierda "no pueden estar todo el día tirando piedras a sus tejados" y que "lo mejor sería tratar de ir todos juntos, cada uno con su ideología, pero sin tirarse piedras", ya que Podemos "está prosperando demasiado porque el PSOE no ha estado en su sitio".

"Podemos está diciéndole a la gente lo que quiere oír, pero creo que, a la hora de la verdad, la gente se va a dar cuenta de que todo lo que dicen no es posible porque todavía no está el campo para estas fiestas", reflexiona.

Por eso, Antonio Fernández es firme partidario de que el PSOE promulgue "pactos" con partidos de la izquierda porque "la gente está muy enfadada: no hay derecho a que gobiernen los que no trabajan y que vivan a cuenta de todos los demás".

A muchos de esos culpa de la situación que existe en el entorno rural, donde él vivió, trabajó y vio pasar una guerra que le ha dejado recuerdos "muy jodidos" que a día de hoy todavía le hacen "pasarlo mal".

Con el paso de los años, tanto Antonio Fernández como su familia y sus vecinos, se fueron reponiendo.

El ahora candidato trabajó desde los catorce años en los laboratorios de la empresa Cementos Cosmos antes de montar un horno de cal con un socio y, más tarde, dedicarse a la cerámica hasta que "se fue todo a tomar por saco" por la deuda de una empresa que "dio en quiebra".

Con un camión y con un campo de viñas que producía "de 15.000 a 30.000 kilos" fue "tirando" hasta la jubilación.

"Para mí la política siempre ha sido un estorbo y me ha costado dinero, pero he salido adelante, nunca necesité limosna", recuerda ahora entre risas.

Este nonagenario admite que siempre hizo lo que pudo, reconoce tener "amigos en el PP" con quienes suele haber "refriegas", aunque de ellas "casi siempre" sale ganando, asegura.

"Yo les digo siempre la verdad y ellos la van viendo", bromea antes de concluir.

Te puede interesar
Más en Sociedad