Las ventas en 2011, en el que Adele volvió a ser la más vendida, experimentaron un descenso del 3%

El consumo de música sufrió su menor caída en ocho años

Adele, la más vendida de los últimos 12 años, en la ceremonia de entrega de los Grammy.
Los últimos datos de la Asociación Internacional de Productores Fonográficos lo dejan claro. Ni Justin Bieber, ni Lady Gaga, ni Pitbull. Adele es la artista más vendida de los últimos 12 años gracias a su segundo álbum, '21', el disco más solicitado en todo el mundo en 2011, con una venta de 18,1 millones de ejemplares, lo que lo convierte en el más vendido del siglo XXI.
El informe anual de la IFPI ofrece 'argumentos alentadores', según apunta la asociación de productores españoles -Promusicae-, pese a los números rojos respecto a 2010. Y es que, en 2011, el mercado de la música grabada generó unos ingresos de 12.600 millones de euros en todo el mundo, lo que supone un descenso del 3% respecto a lo obtenido el ejercicio anterior.

Sin embargo, el retroceso es 'el más tenue desde que el mercado discográfico comenzara en l año 2004 una acentuada contracción' a nivel mundial. Promusicae atribuye esta moderación al 'creciente desarrollo de los distintos modelos de negocio digital' y a la aprobación de leyes contra la piratería en países como España, Francia o Irlanda.En la moderación de esa caída resultó 'clave' que EE.UU. y Alemania (primer y tercer mercado del mundo, respectivamente) se mantuvieran prácticamente estables respecto a 2010. Además, de los 20 mayores mercados del mundo, siete incrementaron ingresos: Canadá, Suecia, India, Corea del Sur, Brasil, México y Australia.

Aún más importante es el incremento del mercado digital. En términos internacionales ya representa el 31% del mercado y en 2011 superó por primera vez el listón de los 5.000 millones de dólares (casi 3.800 millones de euros). Mientras que el mercado físico descendió un 8,7% en 2011, los ingresos digitales aumentaron un 8%.


FUTURO MENOS DESOLADOR

Los datos permiten augurar un futuro menos desolador que el que se intuía en años anteriores, cuando al desplome del tradicional mercado físico se le unía el expolio indiscriminado a través de internet. 'Hay margen para confiar en un mejor escenario futuro para los creadores musicales', sentenció la asociación. El caso español es un buen ejemplo concreto de un fenómeno generalizado. 'Las pérdidas en el mercado español fueron, desde el comienzo de siglo, más acentuadas que en el resto del entorno occidental, por la incidencia de la piratería digital casi duplica la media europea', señalan los productores españoles.

'En el año 2011, sin embargo, la contracción de la música grabada en España fue de hasta el 10,7%, aunque esta cifra se atenúa hasta el 3,3% cuando computamos la recaudación por derechos de comunicación pública (emisiones en radios y televisiones)'. Así, en España, el mercado físico prosiguió en línea descendente, en un 16,7%, pero las modalidades digitales aumentaron hasta en 21,1 puntos respecto al año anterior. Dentro de este apartado, los servicios financiados con publicidad (Vevo, Youtube, o la versión gratuita de Spotify) aumentaron considerablemente sus ingresos, hasta en un 57,5%.

Te puede interesar