Hizo entrega en Oviedo de los premios que llevan su nombre, en una ceremonia marcada por las llamadas a la solidaridad

El Príncipe apela a la 'moderación y la ética' para superar la crisis económica

Los jugadores de la selección, junto a Aragones, Villar y Del Bosque, tras recoger el galardón.
Don Felipe de Borbón animó ayer a los españoles a fortalecer las instituciones, 'buscar la moderación donde ha habido excesos' y la 'ética donde haya habido abusos' para superar la crisis, durante la entrega de los Premios Príncipe, ceremonia en la que el escritor Amin Maalouf advirtió de que este siglo estará marcado por el retroceso de este valor. Don Felipe, acompañado de doña Letizia y en presencia de la Reina, presidió en el Teatro Campoamor de Oviedo la ceremonia de entrega de la trigésima edición de los Premios Príncipe de Asturias.
En presencia de los galardonados con los ocho premios, el Príncipe dijo que tiempos de crisis como el actual exigen dar un 'mayor vigor e impulso' a la vida pública, renovar comportamientos y cambiar actitudes'. 'Generemos otra vez ilusión y confianza en proyectos que nos integren y cohesionen cada día más', recalcó el Heredero de la Corona, antes de defender la importancia de la moderación, la ética y el fortalecimiento de las instituciones, 'porque a través de ellas se pueden y deben articular las soluciones que esperan los ciudadanos'.

Tras pedir la unidad de los españoles en torno a estas convicciones, señaló que el ejemplo de anteriores generaciones debe servir de acicate para que los ciudadanos de hoy demuestren que pueden 'volver a ser ejemplo de capacidad, superación y grandeza'. 'Lograremos construir así, con ilusión, una economía más competitiva y eficiente, que no rehuya el riesgo de emprender e innovar', capaz de generar empleo, y 'una sociedad solidaria e inclusiva, en la que tantas personas sin trabajo sepan que su situación es tan solo transitoria, nunca una desesperanza sin final', añadió el Príncipe.

En nombre de los galardonados, Amin Maalouf, Premio de las Letras, advirtió 'con pena' de que el siglo XXI será 'de retroceso ético', aunque tenga progresos científicos y tecnológicos, ya que, en su opinión, 'se recrudecen las afirmaciones identitarias', violentas y retrógradas 'en muchísimas ocasiones', y 'se debilita la solidaridad entre naciones y dentro de las naciones'. También en que 'pierde fuelle el sueño europeo', se 'erosionan los valores democráticos' y se 'recurre con excesiva frecuencia a las operaciones militares y a los estados de excepción'.


DENSOS VELOS IDEOLÓGICOS

El sociólogo polaco Zygmunt Bauman, que comparte el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades junto a su homólogo francés Alain Toruaine, alertó además de que las ideologías son 'densos velos' que hacen que las personas miren 'sin llegar a ver'. En este contexto, señaló que Miguel de Cervantes fue el 'padre fundador de las humanidades' porque fue el primer autor que trató de despedazar 'los velos hechos con remiendos de mitos, máscaras, estereotipos, prejuicios e interpretaciones previas', como expuso en su día el escritor Milan Kundera. Touraine reconoció también durante su intervención en la gala la deuda que mantiene con la cultura hispánica y los fuertes lazos que le unen con todo el mundo latino.

Te puede interesar
Más en Sociedad