El propietario de una carpintería de Cambela (O Bolo), Herminio Alonso, denunció el robo de su maquinaria, obligándole a paralizar su actividad y a desembolsar 12.000 euros.
Los ladrones dejaron sin maquinaria a una carpintería en la localidad de Cambela, en O Bolo, obligando a su propietario, Herminio Alonso Carracedo, a paralizar el trabajo y aplazar todos los pedidos hasta disponer de nuevas máquinas, en cuya compra tendrá que desembolsar más de 12.000 euros.
Los ladrones visitaron el negocio en la madrugada del pasado miércoles y se llevaron seis fresadoras, tres taladros, una clavadora, cuatro juegos de fresas, un cepillo eléctrico, un comprensor, dos lijadoras y una aplanadora, entre otro material, valorado todo en más de 12.000 euros, según recoge la denuncia.
Los ladrones accedieron al interior forzando una puerta y, según los datos que maneja la Guardia Civil, cargaron toda la maquinara en un camión. Los agentes realizaron una inspección ocular en el negocio y sospechan que los ladrones podrían tener el domicilio en la zona y conocer perfectamente lo que había en el interior del negocio.
Los agentes centran las pesquisas entre los industriales del sector, incluidos los domiciliados en las limítrofes provincias de Zamora y León, para cerciorarse de que no les ofrecieron maquinaria a bajo precio para instalar en sus negocios. La investigación aún no había dado resultado en la noche de ayer. Los vecinos del pueblo no se percataron de la presencia de los ladrones ni escucharon ningún ruido.
Los ladrones visitaron el negocio en la madrugada del pasado miércoles y se llevaron seis fresadoras, tres taladros, una clavadora, cuatro juegos de fresas, un cepillo eléctrico, un comprensor, dos lijadoras y una aplanadora, entre otro material, valorado todo en más de 12.000 euros, según recoge la denuncia.
Los ladrones accedieron al interior forzando una puerta y, según los datos que maneja la Guardia Civil, cargaron toda la maquinara en un camión. Los agentes realizaron una inspección ocular en el negocio y sospechan que los ladrones podrían tener el domicilio en la zona y conocer perfectamente lo que había en el interior del negocio.
Los agentes centran las pesquisas entre los industriales del sector, incluidos los domiciliados en las limítrofes provincias de Zamora y León, para cerciorarse de que no les ofrecieron maquinaria a bajo precio para instalar en sus negocios. La investigación aún no había dado resultado en la noche de ayer. Los vecinos del pueblo no se percataron de la presencia de los ladrones ni escucharon ningún ruido.
