Las dos detenciones corroboraron la confianza que la viuda de Martin Verfondern, Margo Pool, tenía en la resolución del caso el pasado martes. "Sí confío en que se resuelva. La policía es muy optimista", afirmó momentos después de que el fiscal abandonase la aldea donde reside y en cuyo cementerio reposan los restos de su marido.
La viuda, ayer ilocalizable para este diario, explicó recientemente que los agentes de la Guardia Civil la visitaron periódicamente, confirmando así que el caso seguía abierto a pesar de que ya transcurrieron cuatro años desde la desaparición de su marido. El descubrimiento del coche semiquemado y sin las placas de la matrícula, a escasos metros de los restos de su marido, habían confirmado sus peores presagios.
A su vez, el alcalde de Petín, Miguel Bautista Carballo, recibió ayer la noticia de la detención de los dos hermanos de Santoalla con un "sabor agridulce". Cansado de ver como periódicamente el Concello aparece en los medios de comunicación relacionado con un suceso terrible, como es el homicidio del holandés, el hecho de que la investigación haya detenido a dos personas como presuntos autores podría suponer que la localidad petinesa recobre la normalidad. "Estoy esperando que esto se acabe de una vez", dijo ayer el regidor.
Sin embargo, la circunstancia de que los detenidos como presuntos autores del homicidio sean dos vecinos muy conocidos en Petín dista mucho de agradar al regidor. "Al mismo tiempo, no me gustaría que fuera esta familia", añadió.
"Es un asunto delicado. Ojalá que no sean ellos los autores, pero que se aclare de una vez"!, exclamó Miguel Bautista, quien afirmó mantener una buena relación con la familia implicada.
