La escasez de lluvias del año pasado impidió que las grietas surgidas en el santuario bolés de As Ermidas aumentasen de tamaño en el último trimestre, según el informe realizado por Ingeofisa, que dio a conocer Luis Maroto, vicepresidente de la Asociación Nuestra Señora de As Ermidas. En su entrevista con los técnicos de Patrimonio, planteó una serie de obras de urgente ejecución, como el desvío de las aguas subterráneas que encharcan el templo o la construcción de una cocina para quienes viven en el recinto.
El último informe de la empresa Ingeofisa indica que la sequía del año pasado detuvo el aumento del tamaño de las grietas del santuario bolés de As Ermidas. Lo indicó el vicepresidente de la Asociación Nuestra Señora de As Ermidas, Luis Maroto, quien apuntó que en el último trimestre no se movió nada el edificio.
La deformación de las estructuras del santuario sí aumentó en los periodos anteriores por la inestabilidad del terreno, variando entre uno y 1,5 milímetros. No es preocupante si no va a más, comentó Luis Maroto.
La asociación, creada para promocionar el complejo formado por el santuario y el seminario de As Ermidas, aboga por mantener el seguimiento de su conservación. Esta necesidad fue planteada al jefe de servicio de Patrimonio en Ourense, Manuel Vecoña, en su visita al concello. El colectivo urge su ejecución, con independencia del compromiso del director xeral de Patrimonio y del subdirector xeral de Protección Patrimonial -Felipe Arias y Francisco Garrido, respectivamente- de que el plan director del Bien de Interés Cultural (BIC) de As Ermidas estará listo en el 2008. Además, indicaron que la Xunta asume su conservación y la corrección de los defectos.
Mantener la vigilancia de las deficiencias del templo no es la única urgencia que apunta la asociación. Otra es el desvío del agua subterránea que, con las lluvias, se filtra al interior del santuario, donde crea grandes charcos. Este problema podría corregirse construyendo un sistema de drenaje que capte el agua a cierta profundidad y que la canalice hacia el exterior, según apuntó Luis Maroto.
Además, los canalones de la construcción deberán ser reparados a la mayor brevedad, dado su deficiente estado de conservación.
Finalmente, la asociación plantea la construcción de una cocina. Sobre este particular, recuerda que, a raíz del derrumbe del edificio donde estaba ubicado el anterior servicio -ocurrido el 28 de diciembre del 2002-, fue colocada provisionalmente una pequeña cocina sobre una mesa. Cinco años después, la comida continúa cocinándose en el mismo electrodoméstico.
Pero esta reparación no es competencia de Patrimonio, sino del Obispado de Astorga, que envió un arquitecto técnico a la reunión que se desarrolló en As Ermidas.
Reclaman un museo para las arrinconadas obras de arte
El vicepresidente de la Asociación Nuestra Señora de As Ermidas también puso en conocimiento de Patrimonio una serie de sugerencias para su inclusión en el plan director.
Una de ellas alude a la organización del museo del santuario, cuyos cuadros y demás obras de arte permanecen arrinconadas, según apuntó Luis Maroto. En este sentido, apuntó la necesidad de acometer la limpieza y recuperación de los cuadros y esculturas.
Además, propone la reconstrucción del órgano, que se encuentra en un estado de conservación muy deficiente.
Estas mejoras permitirían la organización de visitas guiadas, para lo cual sería preciso dotar al recinto con una oficina de información. Pero los peregrinos también necesitan comer, por lo que plantea la creación de un servicio de alojamiento y hostelería para ellos. Es primordial, estimó.
Finalmente, la propuesta de este colectivo para el plan director incluye diferentes obras a realizar en el templo, desde la corrección de la degradación de la piedra granítica hasta la eliminación de la antigua caseta del transformador, situada dentro del recinto.
La deformación de las estructuras del santuario sí aumentó en los periodos anteriores por la inestabilidad del terreno, variando entre uno y 1,5 milímetros. No es preocupante si no va a más, comentó Luis Maroto.
La asociación, creada para promocionar el complejo formado por el santuario y el seminario de As Ermidas, aboga por mantener el seguimiento de su conservación. Esta necesidad fue planteada al jefe de servicio de Patrimonio en Ourense, Manuel Vecoña, en su visita al concello. El colectivo urge su ejecución, con independencia del compromiso del director xeral de Patrimonio y del subdirector xeral de Protección Patrimonial -Felipe Arias y Francisco Garrido, respectivamente- de que el plan director del Bien de Interés Cultural (BIC) de As Ermidas estará listo en el 2008. Además, indicaron que la Xunta asume su conservación y la corrección de los defectos.
Mantener la vigilancia de las deficiencias del templo no es la única urgencia que apunta la asociación. Otra es el desvío del agua subterránea que, con las lluvias, se filtra al interior del santuario, donde crea grandes charcos. Este problema podría corregirse construyendo un sistema de drenaje que capte el agua a cierta profundidad y que la canalice hacia el exterior, según apuntó Luis Maroto.
Además, los canalones de la construcción deberán ser reparados a la mayor brevedad, dado su deficiente estado de conservación.
Finalmente, la asociación plantea la construcción de una cocina. Sobre este particular, recuerda que, a raíz del derrumbe del edificio donde estaba ubicado el anterior servicio -ocurrido el 28 de diciembre del 2002-, fue colocada provisionalmente una pequeña cocina sobre una mesa. Cinco años después, la comida continúa cocinándose en el mismo electrodoméstico.
Pero esta reparación no es competencia de Patrimonio, sino del Obispado de Astorga, que envió un arquitecto técnico a la reunión que se desarrolló en As Ermidas.
Reclaman un museo para las arrinconadas obras de arte
El vicepresidente de la Asociación Nuestra Señora de As Ermidas también puso en conocimiento de Patrimonio una serie de sugerencias para su inclusión en el plan director.
Una de ellas alude a la organización del museo del santuario, cuyos cuadros y demás obras de arte permanecen arrinconadas, según apuntó Luis Maroto. En este sentido, apuntó la necesidad de acometer la limpieza y recuperación de los cuadros y esculturas.
Además, propone la reconstrucción del órgano, que se encuentra en un estado de conservación muy deficiente.
Estas mejoras permitirían la organización de visitas guiadas, para lo cual sería preciso dotar al recinto con una oficina de información. Pero los peregrinos también necesitan comer, por lo que plantea la creación de un servicio de alojamiento y hostelería para ellos. Es primordial, estimó.
Finalmente, la propuesta de este colectivo para el plan director incluye diferentes obras a realizar en el templo, desde la corrección de la degradación de la piedra granítica hasta la eliminación de la antigua caseta del transformador, situada dentro del recinto.
