La Diputación finalizó la propuesta que presentará en breve a los alcaldes de la comarca
La aplicación de las tasas de depuración de las aguas residuales variará en función de las características de cada vivienda y su consumo. Estas diferencias fueron anunciadas ayer por el alcalde de A Rúa y diputado popular, Avelino García Ferradal. El regidor explicó que los técnicos de Aquaourense finalizaron el borrador del reglamento que regulará su cobro, un texto que la Diputación presentará próximamente al pleno del Consorcio de Augas de Valdeorras, en el que participan los nueve alcaldes de la comarca, la Diputación -cuyo representante ocupa la presidencia- y Augas de Galicia.
El regidor explicó que las cuantías de las tasas dependerán de las distintas situaciones que se dan entre los vecinos. Sus importes serán determinados en función de la existencia o ausencia de contador en las viviendas, también influirá si sus aguas residuales son conducidas a la red o bien a una fosa séptica y, si se da este último caso, si esta se puede limpiar o no.
"Ya se hizo el borrador y lo expondrán pronto", dijo Avelino García. Añadió que en la reunión con los alcaldes se estudiará si la propuesta se ajusta a las características de la comarca. También explicó que la sustitución del director de Augas de Galicia Francisco Menéndez por Gonzalo Mosquera demoró la convocatoria. En tanto la cita no se desarrolla, el cobro de la nueva tasa continúa suspendido, obedeciendo a un acuerdo alcanzado a principios de abril.
La paralización del cobro de la tasa propuesta inicialmente fue motivada por el aluvión de protestas con que fue recibida su aplicación, negándose un buen número de vecinos de pueblos como O Castro y Éntoma (O Barco) o Prada (A Veiga) a realizar el pago que les reclamaba el servicio de Recaudación de la Diputación provincial.
El servicio de Recaudación calculó el importe de los recibos que ayudarán a financiar la depuración de las aguas residuales de la comarca en función del consumo de agua de las viviendas. Para ello, estableció una serie de tramos, siendo el mínimo trimestral aplicado a los domicilios de 1,5 euros, cantidad que corresponde a un consumo inferior a los 18 metros cúbicos.
El problema surge cuando el personal de la Diputación no puede efectuar el citado cálculo, una situación que se da con mucha frecuencia en los pueblos del rural valdeorrés, donde muchas casas carecen de contadores. Entonces, los técnicos aplican la Lei de Augas de Galicia, que calcula tres habitantes para cada vivienda y un consumo de 42 metros cúbicos. En estos casos, el recibo alcanza 11,70 euros.
Muchas de estas casas solo son ocupadas los fines de semana, lo que no evita a sus propietarios abonar los 11,70 euros, en tanto que una vivienda habitual con contador no paga más de 1,50 euros.
