Opinión

Peleteiro, ¡mi madriña!, y Ben en un día de récords

Ana Peleteiro en al final de triple salto de Tokyo 2020
photo_camera Ana Peleteiro en al final de triple salto de Tokyo 2020

El repartidor de pizza preguntó al entregar el pedido si la gallega de triple salto seguía conservando el bronce. Hay acentos que dicen tanto como el pasaporte y el alboroto que salía de la tele no era de la retransmisión de la misa. Asomó el casco para flipar con la repetición del brinco de la venezolana Yulimar Rojas hacia el récord del mundo (15.67 metros). En el primer intento ya había batido el olímpico. “Se nota que entrenan juntas”, comentó al ver a Ana Peleteiro abrazada a Yulimar por una plusmarca que se resistía desde 1995. “El leonés Saúl Ordóñez no estuvo fino en la clasificación del 800, pero tu paisano Adrián Ben se ha salido hoy el tío”. Y se marchó pitando sin tiempo a proponerle que escribiese esta columna que carga con el medallero en las páginas del periódico. Más que propina daban ganas de darle un abrazo.

Ray Zapata –Peleteiro es madrina de su hija Olympia– ya había sumado una plata en el concurso de suelo de gimnasia artística, aunque se fue con la sensación de que le habían sisado el oro. Después llegó la mejor jornada del atletismo gallego en unos Juegos. “Aquí estamos, de Viveiro a la final olímpica de Tokio”, comentó Adrián Ben al finalizar una carrera en la que calculó el tiempo de paso como un matemático, sin perder los nervios por una salida muy rápida. Nunca un atleta español había alcanzado la  final de 800 metros, una de las pruebas más crispantes. Ya ha hecho historia, como Peleteiro al lograr el primer metal del atletismo gallego en unos Juegos. Batió dos veces el récord de España (14.77 y 14.87 metros) para regresar a Ribeira con el bronce.

La pista de Tokio es mágica y “se non è vero, è ben trovato”. La portorriqueña Jasmine Camacho-Qinn batió el récord olímpico de 100 vallas en la clasificación (12.26); el brasileño Dos Santos el de Sudamérica en la de 400 vallas (47.31); el chino Su Bingtian el de Asia en la semifinal de los 100 metros (9.83) y el italiano Jacobs el de Europa en la final (9.80). 

El sucesor de Usain Bolt en la prueba reina es italiano. ¡La pizza!

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