Las latas, de su marca blanca, fueron examinadas por sospechas de la presencia de toxina botulínica
Una alerta sanitaria obligó al Grupo Dia a retirar un lote de 24.576 latas de sardinas en aceite de oliva en conserva de su propia marca, fabricada por Cofisa, Conservas de Peixe de Figueira S.A., ante un posible defecto de esterilización de algunas de esas latas.
La compañía informó en un comunicado de que se trata del lote 2694L con caducidad en julio de 2023, que se distribuyó en diferentes establecimientos de la compañía en España y Portugal.
La empresa se vio obligada a difundir un comunicado asegurando que se trataba de una medida preventiva fruto de los análisis periódicos que la compañía realiza a todos los productos. Un mensaje viral a través de WhatsApp y difundido en redes sociales alertó estos días de que los lotes podrían estar contaminados por Clostridium botulinum, es decir, el agente que produce la enfermedad del botulismo, algo no demostrado.
Sospechas de infección
La empresa se vio obligada a aclarar posteriormente que la retirada del lote se produce ante la sospecha de la presencia de toxina botulínica, aunque los contraanálisis realizados en las latas con posterioridad resultaron negativos. Desde la compañía indican que todos los clientes que hayan adquirido este lote pueden devolverlo en su tienda más cercana o si tienen alguna duda dirigirse al Servicio de Atención al Cliente o a través de su página web. Algunos establecimientos tienen un cartel en el que informan a los usuarios.
Un trastorno poco frecuente pero grave
La contaminación por Clostridium botulinum, una bacteria que produce el botulismo, es un trastorno poco frecuente pero grave que se puede llegar a producir de hasta tres formas.
Transmitido por los alimentos. Las bacterias se reproducen y producen la sustancia tóxica en ambientes con poco oxígeno como las conservas caseras.
Las heridas cortantes pueden también provocar una infección peligrosa que produce la sustancia tóxica. La más común es, por último, la que crece en el tracto intestinal del bebé.
Todos los casos pueden ser mortales y sus síntomas, sobre todo los producidos por alimentos, provocan ver doble, vista borrosa o dificultad para hablar y tragar, entre otros.
