LA ENTREVISTA

"Las TIC gallegas necesitan más músculo para competir mejor en el extranjero"

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Constantino Fernández Pico es el presidente de Altia, una compañía que ha fijado como objetivo mejorar su cuota de mercado en España, pero también saltar al extranjero, principalmente a los países de Sudamérica.

Constantino Fernández Pico es el presidente de Altia, una firma fundada en el año 1994 especializada en servicios relacionados con el mundo de las tecnologías de la información y la comunicación. Está presente en siete centros de trabajo distribuidos por España. La compañía se ha fijado como objetivo mejorar su cuota de mercado en España, pero también saltar al extranjero, principalmente a los países de Sudamérica.

¿En qué momento está actualmente Altia?

La situación de Altia es la de una empresa que trata de competir en el mundo de las tecnologías de la información y de los servicios (entrega de sistemas o desarrollo de software a medida). Poco a poco intentamos seguir el proyecto de expansión que iniciamos hace unos años, reafirmado nuestro plan estratégico que tiene un año de vida. Seguir creciendo y ganando mercados para reforzar nuestra posición.

¿Qué proyectos tienen en marcha? ¿Alguno especialmente relevante?

No me gusta hablar de clientes concretos. Sí tenemos un montón de proyectos en el área de la externalización de servicios, tanto en la parte de desarrollos como la  de servicios gestionados, una cartera extensa en la que hay que seguir creciendo. Estamos contentos en cómo están funcionando también los proyectos que están ganando fuera de España, concretamente el del Gobierno de Chile.

¿Qué posición quiere para Altia en el futuro?

Seguir apostando por lo mismo. En España hay mucho camino por recorrer. Nuestra cuota de mercado nos hace ser optimistas con lo que se puede conseguir en el mercado doméstico. Interpretar las tendencias tecnológicas y trasladarlas con valor añadido a nuestros clientes y ser capaces de sobrevivir en un entorno que ofrece muchas oportunidades, porque la tecnología está muy presente en nuestras vidas...

Parece que todo son ventajas...

Al igual que hay muchas oportunidades también hay muchas amenazas, muchas tecnologías nuevas y competidores que te obligan a  estar muy en forma.

¿Por dónde pasa el plan estratégico de Altia?

Este plan lo hemos formulado con el horizonte 2020, pero no lo hemos publicado en el MAB. Sí podemos decir que la idea sigue siendo crecer y ganar más territorios y clientes. Todavía tenemos que abordar el mercado de Madrid, el 50% de los gastos pasan por ahí y tiene mucho recorrido. También Sudamérica, a través de proyectos de alto valor añadido.

¿En qué han crecido más, bienes o servicios?

Somos una empresa más de servicios que productos, nuestra facturación está en los servicios. Estamos atentos y trabajando en todas las transformaciones de las organizaciones, de servicios gestionados. Hay que seguir creciendo en la externalización.

¿Cómo observa el sector TIC en Galicia?

Es un sector muy importante, con muchísimo talento y con un montón de empresas buenas. El problema en general es el tamaño de las empresas. Necesitan un poco más de músculo para poder dar saltos y competir con fuerza en el mercado internacional.

¿Cómo valora su experiencia en el MAB (Mercado Alternativo Bursátil)?

Muy positiva para nosotros. Si hay que plantearlo de nuevo, lo volveríamos a hacer. Es la mejor manera de definirlo. Desde el punto de vista cualitativo, la empresa se ha multiplicado por 4,5 desde que hemos salido al MAB. No hablaría de crisis en las TIC, pero sí de mercados que no han crecido tanto. El MAB lo recomiendo, tiene muchas ventajas más allá de captar dinero y de la imagen, es bueno estar en un mercado y saber cuánto vales. 

Multiplicar la empresa por 4,5 es un dato muy bueno...

Sí, sí. No gracias a estar en el MAB firmas contratos, pero está claro que tampoco perjudica. Es un elemento adicional que te ayuda. Nuestros proyectos son de siembra larga y para que se traduzca en facturación es un proceso largo.

¿Cómo se compatibiliza ser presidente de Altia y del Deportivo de A Coruña?

Trabajando más, aunque muchas horas ya no tenía. Renunciando a todo lo que no sea esas dos cuestiones, quitando toda la actividad de ocio. Pero también tratando de apoyarme en los equipos. En el caso de Altia es extraordinario y en el del Deportivo estamos haciendo un reparto de funciones y tareas. Veníamos de un presidente más personalista y estamos incorporando directores en diferentes áreas y responsabilidad. Hay proyectos empresariales mucho más grandes que la suma de estos dos y la gente los saca adelante.

¿Está satisfecho con ambos?

Satisfecho... Hay que mejorar en los dos lados. En Altia seguir creciendo, de lo que queremos que sea, y en el Deportivo también. No estamos contentos con la posición en la que estamos. Tenemos además un reto económico por delante. Segir compitiendo en la Primera División es lo que permite pagar la deuda que tenemos cuanto antes.

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