Un susto descomunal se llevaron ayer en un concesionario de la avenida de Madrid cuando uno de los coches prácticamente que salía volando por una cristalera
El incidente se produjo cuando uno de los empleados fue a mover el vehículo y no se dio cuenta de que tenía metida una marcha. Al accionar la llave de contacto el turismo salió impulsado hacia adelante rompiendo la cristalera quedando con las ruedas delanteras fuera del edificio. Por suerte, todo quedó en un susto y unos cuentos cristales rotos.
