El Concello acaba de instalar el mobiliario para abrir de forma provisional
La emblemática Casa do Escudo de Verín se convertirá en un corto espacio de tiempo en uno de los principales albergues de la Ruta da Prata y el Camiño Portugués do Interior. Y lo será por la belleza del edificio (un pazo con un gran escudo en la entrada) y la comodidad que ofrece su interior a la hora de descansar tras largas caminatas.
El Concello acaba de finalizar la primera fase de la remodelación del inmueble, que hasta hace unos meses estaba destinado a sala de exposiciones, oficina de turismo y albergue, aunque éste solamente afectaba al sótano y disponía de 12 plazas.
Los trabajos realizados ahora sirvieron para habilitar una gran sala de descanso en la misma entrada del edificio, un espacio para recibir a los peregrinos y la construcción de habitaciones, que están situadas en la primera planta del inmueble, donde hasta hace poco se exponían obras de arte.
En total son 43 plazas, en las que los peregrinos dispondrán de duchas, baños e incluso sala de televisión, lavandería y cocina.
El alcalde, Juan Manuel Jiménez Morán, se mostró satisfecho con el proyecto, que en los próximos meses aún sufrirá mejoras. "Vamos a colocar una gran cristalera en la planta baja para que la sala de descanso gane mucha más iluminación", apuntó el regidor.
El albergue estará abierto todos los días con personal municipal propio para atender a los caminantes y ofrecer información sobre las distintas rutas a seguir hacia Compostela. El número de peregrinos que llegan a Verín se incrementó en los últimos dos años (más de 2.000 en lo que va de 2014) con la apertura de la ruta lusa, que comienza en Viseu y pasa por Chaves.
Jiménez Morán entiende que la villa debe ofrecer unas "instalaciones de calidad" al ser un "nudo" importante de las dos rutas jacaboeas y entrada de Galicia desde Castilla y Portugal.
