Pablo López, de 31 años, sustituirá a Jesús Conde, que renunció en mayo por las protestas vecinales
Los feligreses de Punxín contarán a partir de mediados de este mes de noviembre con un nuevo párroco. El Obispado confirmaba que se trata de Pablo López López, de 31 años, natural de Castro Dozón, que ha sido nombrado administrador de las parroquias de Santiago de Parada de Amoeiro, San Juan de Abruciños, Santa Mariña de Fontefría, San Juan de Ourantes, Santa María de Freás de Maside y Santa María de Punxín.
Los feligreses de Punxín y Freás habían impedido el paso del anterior sacerdote, Jesús Conde, a la iglesia el pasado 11 de mayo, solicitando a las autoridades eclesiástica su relevo. El cura sólo llevaba tres meses en Punxín, pero los vecinos estaban descontentos por su modo de actuar y fue un domingo, tras negarse el cura a escuchar sus reclamaciones, cuando le impidieron entrar a la iglesia para oficiar la misa. El sacerdote renunciaba posteriormente a las parroquias de Punxín y Freás, y desde entonces el puesto ha estado sin cubrir, pendiente el Obispado de hacer una redistribución de sacerdotes por causa de su reducido número.
Pablo López López no quiso opinar sobre la polémica con el anterior párroco, puntualizando que "sólo quero calma e tranquilidade, non quero polémicas", y añadiendo que "estou encantado" con las nuevas parroquias "que incluso me liberan algo de traballo porque tiña oito e agora serán seis".
El cura era el responsable de ocho parroquias en Os Milagros hasta esta nueva redistribución realizada por el Obispado. Fue diácono en 2007 y ordenado sacerdote en el año 2008.
