O CARBALLIñO

Los músicos reivindican el papel de la mujer en A Saleta

photo_camera Las músicas y los músicos disfrazados actuaron en la Romaría da Saleta (XESÚS FARIÑAS)

Acudieron a la romería disfrazados y tocaron gratis para hacer valer en la romería a las gaiteiras

La Romaría da Saleta reunió, pese a la lluvia, a cientos de devotos. El tiempo, aunque inestable, concedió una pequeña tregua y así se pudo celebrar la procesión y comer en los puestos ambulantes que allí se instalaron. Este año la romería llegó precedida de la polémica y tal y como se había anunciado un grupo de músicos y amigos protagonizaron una acción protesta-festiva, tocando música pese a no haber sido contratados por la comisión organizadora, al mismo tiempo que los hombres se presentaron disfrazados de mujeres para reivindicar la importancia del papel femenino en la música popular.

Todo ello en respuesta a lo que los músicos consideran una discriminación hacia la gaiteira Patricia Gamallo, de la agrupación Habelas Hainas, que contaba con ir a tocar a la romería formando parte de un cuarteto y que finalmente no pudo ser porque "na comisión houbo alguén que lle dixo a un dos gaiteiros do cuarteto que só querían homes, que, por tradición, na romaría os gaiteiros eran homes", explicaba Anaís Barbier, secretaria de la Asociación Os Serandeiros.

Eso desencadenó la polémica y reconocían los músicos que la comisión organizadora cambiaba más tarde de opinión y comunicaba que podía tocar la gaiteira. "O mal xa estaba feito e entendemos que non podemos deixar pasar algo así", añadía Barbier.

De esta forma, se juntó un grupo de músicos de A Guarda, Pontevedra, Vigo, Carballiño y Boborás, entre otras procedencias, quienes tocaron música tradicional y disfrutaron de la jornada festiva.

Finalmente, fue contratado por la organización el grupo de gaiteiros Furafoles, integrado por dos hombres y dos mujeres, para amenizar la romería junto con otras formaciones musicales. La presencia de los músicos caracterizados de mujeres y tocando sin haber sido contratados no agradó a todos los presentes. Un grupo de mozos de Astureses, la parroquia de Boborás en donde tiene lugar la romería, manifestaban su malestar, asegurando que la organización corría a cargo de cinco mujeres y que en ningún momento existió una actitud machista por parte de la comisión. Plácido Ferreiro y José Ángel Cabo se referían a la sorpresa de todo un pueblo cuando saltó la polémica, matizando que "nós formamos parte doutras comisións e nunca rexeitamos ás mulleres, e este ano o motivo tampouco foi o machismo, poden ser económicos ou de outra índole".

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