SALUD

El 6% de las madres opta por el parto sin asistencia médica

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photo_camera Sala del CHUO habilitada para partos no intervenidos.

El jefe de Obstetricia y Ginecología, José Luis Doval, considera "insuficiente" una única sala adaptada

Las mujeres embarazadas atendidas por el servicio de Obstetricia y Ginecología del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) pueden, desde finales de 2008, dar a luz de manera natural en una sala habilitada para ese fin. Durante 2015, alrededor de 80 madres optaron por esa modalidad de parto; es decir, en torno a un seis por ciento -el Materno Infantil atendió 1.497 partos el año pasado, de los que 1.098 fueron partos vaginales y 399 cesáreas-.

Se trata de una tendencia de reciente surgimiento. Las embarazadas optan por partos menos intervencionistas. El jefe del servicio, José Luis Doval, explicó que para poder dar a luz en este espacio, en primer lugar, la mujer debe manifestar que así lo quiere y, en segundo lugar, su embarazo debe ser clasificado de bajo riesgo. Según relató Doval, las mujeres que optan por esta modalidad de parto están mayoritariamente entre los 30 y los 35 años, y esperan su segundo hijo. Aún así, cada vez hay más primerizas que optan por dar a luz sin intervención medicalizada "y tenemos que dar servicio a esta demanda de las pacientes", apostilló.

El propio Doval valoró positivamente esta posibilidad que se ofrece a las mujeres embarazadas, considerando esta sala como "un gran avance". De hecho, adelantó que el objetivo a largo plazo es que este tipo de asistencia no sea una excepción, sino aceptada como una opción más a la hora de dar a luz. "Cuando la arquitectura nos lo permita, los partos serán otra cosa en el hospital ourensano", apuntó.

Este espacio adecuado ofrece la posibilidad de vivir el parto de una manera más íntima y, sobre todo, menos intervenida. En esta sala, la madre tiene libertad de movimientos, puede estar acompañada, escuchar música o darse un baño en la piscina de agua caliente, con hidromasaje, para favorecer las contracciones. Además, está equipada con una cama automatizada que permite tanto el reposo de la mujer durante la dilatación como la exploración ginecológica, el propio parto y la recuperación inmediatamente posterior de dos horas. Se completa con una silla de partos para aquellas mujeres que opten por esta posición para dar a luz, una cuna térmica para el recién nacido y material de psicomotricidad. "Es el modelo que deberíamos seguir cuando tengamos zona nueva de partos", insistió Doval, haciendo referencia a que "ahora mismo, solo contamos con una y este equipamiento debería ser instalado en todas las salas de parto". Y es que, aunque el porcentaje de madres que opten por este tipo de alumbramiento sea de momento mínimo, ya se ha dado el caso de ponerse de parto al mismo tiempo dos mujeres que habían elegido no poner oxitócitos para estimular las contracciones, ni anestesia epidural y la menor intervención médica posible.

Millán: “Son necesarios más recursos humanos"

Son minoritarias, pero las madres que abogan por los partos no intervenidos tienen una reivindicación clara: se necesitan más recursos humanos y menos técnicos. Así lo defienden desde la asociación nacional El Parto es Nuestro, que también tiene representación en Ourense. La coordinadora del colectivo en Galicia, Pilar Millán, destacó que la clave está en "no realizar intervenciones innecesarias y protocolos rutinarios".

El uso de anestesia epidural es con frecuencia el inicio de la medicalización, ya que esta intervención lleva  a otras. "Varias de las medidas que se han demostrado como más eficaces para reducir su uso son que se deje a la mujer plena libertad de movimiento, se le ofrezcan medios alternativos para el control del dolor y que la atención que se preste durante el parto sea de una matrona por cada mujer y esto no siempre es así, destacó Millán, añadiendo que "es en ese ámbito donde Ourense cojea, ya que hay muy pocas matronas, calculamos que ocho o nueve en toda la provincia". La falta de información  hace que muchas madres "pasen directamente a pedir la epidural sin conocer otros medios analgésicos alternativos", concluyó.

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