O Barco retira placas de la Guerra Civil de tres iglesias

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photo_camera Una de las placas que pidió retirar el Ateneo Republicano.

La medida, reclamada por el Ateneo Republicano, fue aceptada por el Obispado de Astorga 

El sector vecinal que mostró su malestar por la retirada de la placa colocada en la fachada de la iglesia de Santa Mariña, en recuerdo de fallecidos durante la Guerra Civil, no deberá ir muy lejos para encontrar a su autor: el Concello. Lo confirmó ayer el alcalde socialista, Alfredo García Rodríguez.

El regidor recordó la petición que el 14 de abril de 2015, coincidiendo con los actos en recuerdo de la proclamación de la II República, registró el Ateneo Republicano de Valdeorras en el Concello. El escrito presentado recordaba la Ley 52/2007, de 26 de diciembre, de la Memoria Histórica.

Los republicanos valdeorreses solicitaron la retirada de las placas colocadas en tres iglesias, de otros tantos pueblos de O Barco: Alixo, Santa Mariña y Santigoso. El escrito explicaba que los nombres recogían los fallecidos "de un so bando da contienda orixinada polo levantamento militar golpista contra as institucións da República legalmente constituida".

El alcalde, Alfredo García, recordó que la citada propuesta fue llevada a pleno y remitido al Obispado de Astorga para que aplicase la Ley. "El Obispado dijo que no tenía inconveniente en quitarlas, pero que si podría retirarlas el Concello. Las placas las recogieron ellos", dijo el regidor. Los trabajos fueron realizados por la brigada municipal a finales de la semana pasada.

"La Ley es para todos y hay que cumplirla. El Concello actuó al ser consciente de que se estaba incumpliendo. Además, no creo que esas placas sean motivo de orgullo para ningún pueblo", añadió el alcalde.

No todos comparten la tesis del alcalde. "Estamos indignados. ¿Quién pudo entrar allí? Es la iglesia de toda la vida y sentó muy mal", protestaron fuentes vecinales del pueblo de Santa Mariña este domingo, horas después de tener conocimiento de que la placa había sido retirada y asegurar su desconocimiento de la identidad de quienes la habían arrancado. "Es un acto vandálico. Estamos muy en contra", añadieron.

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