Los incendios en los dos inmuebles, que pertenecen a una misma familia, fueron provocados
Los daños causados por el fuego en la bodega y en la antigua capilla, hoy utilizada como almacén de aperos agrícolas, no fueron excesivos gracias a la rápida intervención de los bomberos. Intervinieron los del Consorcio contra Incendios e de Salvamento de Valdeorras y del Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de O Barco. Lograron que los desperfectos apenas afectaron a sus puertas de madera, pero pudieron ser mayores, si los autores, pues todos los indicios indican que fueron provocados, hubieran actuado antes y las llamas no hubiesen sido vistas en al poco de ser provocadas con un acelerante.
El primer fuego fue descubierto a las 10,00 horas de ayer en la antigua capilla, que muchos relacionan con la figura de Antonio José Ruiz de Padrón (La Gomera, 1757-Vilamartín, 1823, conocido por su participación en las Cortes de Cádiz de 1812 y homenajeado recientemente en Vilamartín) y afirman que sus restos descansan en el interior. No todos los estudiosos comparten esta teoría pero la familia propietaria quiere restaurarla. Hoy en día, la antigua construcción es utilizada para guardar aperos agrícolas, que sus propietarios C.L.G y E.L.R. utilizan en las viñas próximas.
Cuando familia y vecinos de Cima de Vila, donde está ubicada la capilla, trabajaban en la extinción de las llamas, uno de los dueños se desplazó hasta Vilamartín para avisar a los bomberos. En el trayecto se encontró con que la gruesa puerta de la bodega también ardía. Se trata de la "cova" número 26 de la Festa das Covas de Vilamartín, que hoy congregará a varios miles de visitantes en la localidad.
Llegados al lugar, los bomberos se repartieron, logrando apagar los fuegos en muy poco tiempo y evitar daños mayores. Ahora, la Guardia Civil busca al autor o autores.
