Aquilino Valencia, el alcalde de Calvos de Randín, ha decidido someterse a una moción de confianza y delegar hasta entonces todas sus competencias como regidor. Se adelanta así a la moción de censura que preparan contra él el concejal disidente de su grupo y los cuatro que abandonaron el Partido Popular.
El alcalde de Calvos, el socialista Aquilino Valencia, ha decidido adelantarse a la moción de censura que preparan contra él un concejal disidente y los cuatro ex ediles del PP. Y lo ha hecho tomado dos decisiones: presentar una moción para someter a debate la confianza que tiene la Corporación que lo eligió (el pleno se desarrollará el 29 de mayo y de perder la votación debería tomar la decisión a dimitir) y delegar hasta el día de la sesión todas sus competencias en el segundo teniente de alcalde, Cesáreo González Veloso.
Aquilino Valencia señala que la situación de inestabilidad le lleva a plantear dicha moción y afirma que será una forma de aclarar a los ediles y a los vecinos todas las mentiras que se han dicho desde el grupo popular. Argumenta que frente a un ejercicio de piratería política del PP respondo con un ejercicio de pureza democrática y lealtad al pueblo que me eligió como alcalde, anteponiendo los intereses de los ciudadanos a los míos propios. La hora de la sesión plenaria aún no se fijó.
Aquilino Valencia señala que la situación de inestabilidad le lleva a plantear dicha moción y afirma que será una forma de aclarar a los ediles y a los vecinos todas las mentiras que se han dicho desde el grupo popular. Argumenta que frente a un ejercicio de piratería política del PP respondo con un ejercicio de pureza democrática y lealtad al pueblo que me eligió como alcalde, anteponiendo los intereses de los ciudadanos a los míos propios. La hora de la sesión plenaria aún no se fijó.
