La Consellería de Innovación e Industria destinará más de 4,5 millones de euros a ampliar la red gallega de centros de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) con cuatro sedes fijas en sendas comarcas, tres unidades móviles itinerantes y un túnel de frío; que reforzarán la red integrada actualmente por 19 estaciones fijas y otras seis móviles.
Las localidades de Xinzo de Limia (Ourense), Baio (A Coruña), Vilalba (Lugo) y Bueu (Pontevedra) serán las que acojan plantas de 2.500 metros cuadrados que contarán con una línea de inspección y otra complementaria para atender a los ciclomotores, que a partir de 2009 tendrán que pasar la revisión. Las cuatro plantas se equiparán con maquinaria de última generación para atender los parques de vehículos de sus zonas, que oscilan entre los 22.000 y los 38.000 automóviles.
Así lo aseguró hoy el conselleiro del ramo, Fernando Blanco, en una rueda de prensa celebrada en Santiago, en la que también avanzó que las unidades móviles comenzarán a funcionar a lo largo de este año, mientras que la construcción de los centros fijos finalizará en siete meses tras la obtención de la licencia urbanística. De este modo, auguró que, una vez construidos estos centros, no será necesaria una nueva ampliación de la red hasta dentro de tres años.
Además, el titular de Industria aplaudió que el túnel de frío que se construirá en Sada (A Coruña) con un plazo de ejecución de nueve meses a partir de la obtención de la correspondiente licencia, será el segundo del Estado, puesto que actualmente sólo hay uno situado en Madrid. Permitirá reducir tiempo y costes a un sector que atraviesa por dificultades (el del transporte) y es un gran avance para nuestro ámbito de influencia, proclamó.
A pesar de que la ampliación de la red se centra en acortar desplazamientos a los usuarios y en descongestionar los centros ya existentes --que funcionaban en 2007 al 84 por ciento de su capacidad--, dicho túnel no sólo será utilizado por los más de 11.000 vehículos frigoríficos e isotérmicos que componen la flota gallega, sino que podrá ser aprovechado por otras regiones del noroeste peninsular.
CUATRO NUEVOS CENTROS.
El conselleiro destacó también que la ampliación responde a la necesidad de mejorar el servicio a los ciudadanos a la hora de cumplir una obligación legal ante el incremento anual del tres por ciento del parque de vehículos de Galicia y del 3,5 por ciento anual en el número de inspecciones realizadas.
En el caso de Baio, fue seleccionado por su posición central en A Costa da Morte, un área que, según explicó Blanco, no dispone de servicio de ITV. De este modo, atenderá un parque de vehículos de 26.000 unidades de las comarcas de Xallas y Terra de Soneira, así como de las poblaciones de Fisterra y Bergantiños.
La nueva ITV de Lugo, que se situará en Vilalba, revisará los 30.000 vehículos existentes en la comarca de la Terra Chá y las localidades cercanas de Eume, Meira y Lugo; mientras que Xinzo de Limia dará servicio a 22.000 automóviles de A Limia, Baixa Limia y Terra de Celanova.
Por último, en Pontevedra la nueva estación se situará en Bueu, dentro del parque empresarial cercano a la vía de alta capacidad de O Morrazo, lo que permitirá descongestionar las plantas de ITV de Curro y Vigo, al atender un parque de 38.000 vehículos.
Así lo aseguró hoy el conselleiro del ramo, Fernando Blanco, en una rueda de prensa celebrada en Santiago, en la que también avanzó que las unidades móviles comenzarán a funcionar a lo largo de este año, mientras que la construcción de los centros fijos finalizará en siete meses tras la obtención de la licencia urbanística. De este modo, auguró que, una vez construidos estos centros, no será necesaria una nueva ampliación de la red hasta dentro de tres años.
Además, el titular de Industria aplaudió que el túnel de frío que se construirá en Sada (A Coruña) con un plazo de ejecución de nueve meses a partir de la obtención de la correspondiente licencia, será el segundo del Estado, puesto que actualmente sólo hay uno situado en Madrid. Permitirá reducir tiempo y costes a un sector que atraviesa por dificultades (el del transporte) y es un gran avance para nuestro ámbito de influencia, proclamó.
A pesar de que la ampliación de la red se centra en acortar desplazamientos a los usuarios y en descongestionar los centros ya existentes --que funcionaban en 2007 al 84 por ciento de su capacidad--, dicho túnel no sólo será utilizado por los más de 11.000 vehículos frigoríficos e isotérmicos que componen la flota gallega, sino que podrá ser aprovechado por otras regiones del noroeste peninsular.
CUATRO NUEVOS CENTROS.
El conselleiro destacó también que la ampliación responde a la necesidad de mejorar el servicio a los ciudadanos a la hora de cumplir una obligación legal ante el incremento anual del tres por ciento del parque de vehículos de Galicia y del 3,5 por ciento anual en el número de inspecciones realizadas.
En el caso de Baio, fue seleccionado por su posición central en A Costa da Morte, un área que, según explicó Blanco, no dispone de servicio de ITV. De este modo, atenderá un parque de vehículos de 26.000 unidades de las comarcas de Xallas y Terra de Soneira, así como de las poblaciones de Fisterra y Bergantiños.
La nueva ITV de Lugo, que se situará en Vilalba, revisará los 30.000 vehículos existentes en la comarca de la Terra Chá y las localidades cercanas de Eume, Meira y Lugo; mientras que Xinzo de Limia dará servicio a 22.000 automóviles de A Limia, Baixa Limia y Terra de Celanova.
Por último, en Pontevedra la nueva estación se situará en Bueu, dentro del parque empresarial cercano a la vía de alta capacidad de O Morrazo, lo que permitirá descongestionar las plantas de ITV de Curro y Vigo, al atender un parque de 38.000 vehículos.
