La Guardia Civil detuvo esta mañana a un vecino de Allariz de 46 años como presunto autor de diversos delitos como el de violencia de género, contra la seguridad del tráfico, daños y atentado contra un agente de autoridad.
El hombre, que amenazó con quitarse la vida si su expareja no retomaba la relación, condujo por el casco urbano de Allariz de forma temeraria y negligente, con el riesgo de atropellar a peatones. Además, rompió los cristales de dos puertas de una guardería infantil en la villa alariacana sobre las 10,00 horas. A la misma hora había efectivos de Protección Civil protegiendo a la expareja.
A mayores, el hombre intentó agredir a un agente de la Guardia Civil con una botella. Finalmente, el hombre es detenido, no sin antes propinar varios puñetazos a uno de los guardias. El arrestado finalmente fue evacuado en ambulancia al CHUO para su valoración.