Así es Acouga, el nuevo y moderno hotel que abre sus puertas en Celanova

Hoy es un día especial en Acouga Hotel Boutique de Celanova, ya que supone el arranque oficial de una andadura que sin duda será exitosa. Hoy será la inauguración oficial de esta instalación hotelera (13,00 horas), el segundo hotel de la localidad y el primero en el casco histórico de la villa ourensana. Después de una restauración respetuosa con el edificio original y con el entorno histórico en el que está ubicado abre sus puertas para los visitantes que busquen acougo y descanso.

Su ubicación es inmejorable, en un edificio centenario en la calle Pardo Bazán con vistas a la capilla mozárabe de San Miguel, en el centro de Celanova, muy cerquita de la Plaza Mayor y una de las zonas de más tránsito de la villa. Celanova es una comarca con indudables atractivos turísticos y la apertura de este establecimiento será un factor importante para potenciar su oferta.

La rehabilitación del edificio ha apostado por materiales nobles, líneas limpias y un homenaje a la poesía local que es uno de sus aspectos distintivos. La rehabilitación ha corrido a cargo de MOL Arquitectura. La instalación ha hecho una apuesta por lo local en muchos aspectos en base al lema de Acougo Hotel Boutique: “Celanova siempre será esa madre que nos espera”.

Homenaje a los poetas

Celanova es tierra de poetas y Acouga trata de hacer un homenaje a esa seña de identidad de la localidad. Por eso cuenta con 12 habitaciones vinculadas a poetas locales. Su actual propietario volvió a su Celanova natal para reescribir una nueva página en la historia de este hermoso edificio así como un sentido homenaje a los poetas celanovenses, colocando, en cada una de las habitaciones que alberga esta infraestructura hotelera, un poema de los muchos autores que han nacido en esta villa milenaria de San Rosendo. Desde Curros Enríquez a Baldo Ramos, pasando por Celso Emilio Ferreiro, Castor Elices, Xosé Velo, Paulino Vázquez y Xosé Luis Méndez Ferrín.

El poeta celanovense Baldo Ramos se ha encargado de la numeración y de los cuadros que enmarcan las poesías que dan nombre a cada una de las estancias. La decoración también tiene un aroma muy local gracias a la labor desarrollada por las hermanas Fernández Gándara, de Celavella Arte. La apuesta por lo local se extiende en el ámbito literario con la edición de una revista cultural bianual bajo la dirección de Xosé Benito Reza y también de alimentación, escogiendo a proveedores locales para el desayuno.