En su discurso, el ministro de Cultura, César Antonio Molina, señaló que la toma de posesión de sus nuevos colaboradores se produce en "un momento decisivo", ya que a partir de ahora comenzarán una andadura en un Ministerio "con entusiasmo y optimismo".
Molina, quien dijo afrontar con "ilusión y confianza" su nueva andadura profesional al frente del departamento de Cultura, destacó de los recién nombrados su "experiencia, cualidades y energía" para afrontar los retos y alcanzar los objetivos del Ministerio en sus respectivas áreas.
"En mi opinión, la actitud de un equipo que sustituye a otro ha de ser humilde y respetuosa, agradecida y abierta", precisó, agradeciendo el legado de "logros" de los que "nos precedieron " y deseándoles "mucho éxito" en la continuación de su vida profesional.
"MENTE Y ESPÍRITU ABIERTOS"
Molina pidió a los nuevos cargos tener "la mente y el espíritu abiertos y la curiosidad intelectual intacta y despierta", para así "indagar y aprender sobre los instrumentos que ahora tienen a su disposición".
De la labor desarrollada por Antonio Hidalgo, ex secretario de Cultura, Molina incidió en su "excelente disposición para facilitar el cambio de un equipo a otro" así como su "inteligente asesoramiento".
Mientras que de José Antonio Campos -"profundo conocedor de las artes escénicas y de la música"- y Julián Martínez -"que ha gestionado eficazmente Bellas Artes"- destacó el "fructífero periodo en el que han desarrollado una meritoria y muy apreciada labor".
Tras el acto oficial, el nuevo director general de Bellas Artes declaró a los medios de comunicación que espera "mejorar en todo lo posible la gestión de los centros de arte y los museos" y "cuidar el patrimonio histórico artístico que es de una riqueza excepcional".
Estas mejoras se harán, según el nuevo director de Bellas Artes, gracias al "diálogo con todos los sectores y todos los agentes artísticos y culturales y las distintas fuerzas políticas que componen el parlamento español".
Jiménez, quien confesó sentirse "raro" al estar al otro lado de los medios de comunicación, espera mantener desde su nuevo puesto, "el compromiso con el mundo del arte" y "generalizar en la medida de lo que se pueda la aplicación del Código de Buenas Prácticas de los Museos", un código de buenas intenciones sin ninguna obligación normativa que fue firmado por distintos sectores del arte ante las situación alarmante de algunos museos y centros de arte españoles.
En este sentido, abogó por la implicación de los patronatos en la elección de los directores "siempre dependiendo de las características de los museos, porque hay museos estatales, cuyos puestos que tienen que ser ocupador por funcionarios", matizó.
APROVECHAR EL POTENCIAL DEL REINA SOFÍA
Preguntado por la situación del Museo Reina Sofía, a la espera de convertirse en una agencia estatal para mejorar su gestión, Jiménez, quien aclaró que esta materia no es competencia directa suya, señaló que el Reina Sofía "tiene muchas potencialidades que hay que aprovechar", pero pidió el apoyo social y de los distintos sectores del arte y de la cultura para conseguir "la buena marcha del museo".
"Vamos a trabajar sin improvisaciones pero también sin pausa, vamos a tener dedicación y trabajo y dar soluciones lo antes que se pueda", aseguró.
IMPULSAR EL INAEM
Por su parte, Juan Carlos Marset, nuevo director general del INAEM, indicó que hay que "impulsar todas las unidades del INAEM" y la organización en general del Instituto "para cumplir los retos del futuro, no sólo en su actividad sino también en su estructura y en los mecanismos de funcionamiento".
En esta misma línea, el que fuera delegado de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, indicó que hay que extender la actividad del INAEM a todo el territorio español porque es "el Instituto de las Artes Escénicas y de la Música de todos los españoles" y añadió que buscará la "cooperación con las unidades y administraciones de todo el territorio para intentar que la cultura española sea cada vez más conocida".
Asimismo, advirtió que hay que "responder a la gran demanda que existe de nuestra cultura a nivel internacional y tomar todas las medidas que sean necesarias".
Por otra parte, señaló que hay que "apoyar la creación contemporánea" y trabajar para que la documentación, los archivos y "el gran patrimonio que existe de las artes escénicas y musicales se ponga a disposición del ciudadano por todas las vías posibles, incluso las audiovisuales".
En esta misma línea, el nuevo director del INAEM apostó por mejorar la "comunicación con el ciudadano" y anunció que esta misma tarde se reunirá con el ministro de Cultura, César Antonio Molina, para hablar de los retos del Departamento, y advirtió que de este encuentro "saldrán muchas cosas concretas" que se conocerán en los próximos días.
Al acto, en el que también tomó posesión de su nuevo cargo como director del Gabinete del ministro, Javier Lanza, en sustitución de Adoración Herrador, asistieron personalidades del mundo de la Cultura como la directora de la Biblioteca Nacional, Rosa Regás; el presidente de la SECC, José García Velasco; el consejero de la Comunidad de Madrid Santiago Fisas; el director general del Libro, Rogelio Blanco; el artista Luis Gordillo; el conservador jefe del Museo Thyssen, Guillermo Solana; la directora del Reina Sofía, Ana Martínez de Aguilar; el director general del ICAA, Fernando Lara; el presidente de Promusicae, Antonio Guisasola; la secretaria general técnica del Ministerio de Cultura, Concepción Becerra; la directora del IVAM, Consuelo Císcar; el director del Teatro de La Abadía, José Luis Gómez; o el bailaor Antonio Canales, entre otros.
