José Antonio Hermida, referencia nacional del BTT, citó a los cinco candidatos a las plazas olímpicas en un mirador en Suiza
El miércoles por la mañana el seleccionador nacional, Cristóbal Sánchez, llamó a Pablo Rodríguez para comunicarle que no estaría en los Juegos Olímpicos. Tres plazas, cinco candidatos, seis carreras, muchos intereses e infinitos rumores. Al final serán Carlos Coloma, David Valero y José Antonio Hermida los que aspiren a medalla en Río de Janeiro.
La polémica se ha hecho pública en redes sociales y webs especializadas pero no ha cuajado entre los implicados. Ellos son los que mejor saben lo que ha pasado. Empezando por José Antonio Hermida. La referencia nacional de este deporte disputará en Río sus quintos Juegos Olímpicos. Plata en Atenas y cuarto en los últimos.
"Al cruzar la meta en Londres (2012) me abracé a mi mujer y me dijo: 'Cariño, en Río los destrozas'. Entonces lo veía lejísimos y pensé que no sabía lo que decía. Ahora Río está ahí", dice Hermida.
Cuando habla el biker catalán y de origen ourensano los demás escuchan. Sabe que está en los Juegos por galones y por experiencia. El nivel no se le discute.
El mismo miércoles creó un chat en WhattsApp solo para los cinco corredores: "Quería que hablásemos y que no lo leyese ni el seleccionador, ni mecánicos ni nadie. Solo nosotros. Es complicado porque es algo feliz y triste a la vez para mí. Y muy triste para dos compañeros".
Por eso el viernes, al llegar a Lenzerheide (Suiza), donde hoy se disputa la siguiente prueba de la Copa del Mundo, llamó a uno por uno a Coloma, Mantecón, Valero y Rodríguez. La cita era en Rothorn.
Subieron en teleférico a uno de los miradores más bonitos de Suiza. A más de 3.000 metros de altura. Cinco capuccinos en la mesa. José Antonio Hermida entre Pablo Rodríguez y Carlos Coloma. Frente al ourensano, Sergio Mantecón. Frente a Hermida, David Valero.
Sol. Es la una de la tarde y el entrenamiento de la mañana estaba realizado.
"Te lo has tomado muy bien Pablo"; "¿Qué voy a hacer? Cuando colgué el miércoles estaba hundido"; "La que ha liado"; "Tíos, entre nosotros no puede haber ningún problema"; "Por mí, ninguno"; "Hay un conflicto pero no entre nosotros".
Hablan todos y el ambiente entre ellos es inmejorable. Una cita que acaba con un abrazo entre cinco de los mejores bikers del mundo.
Paga Hermida y antes de bajar se sacan una foto que todos suben a sus cuentas en las redes sociales. Es el 'café de Rothorn'. El presente y el futuro del BTT español. En el descenso, en el teleférico, vuelve a hablar Hermida: "Acordaos de que este será solo un pequeño capítulo en nuestras vidas. Quedaos solo con lo bueno. Os lo digo yo que en un par de años estaré retirado". Quizá con dos medallas olímpicas. Ojalá.
