Gran remontada del Ourense CF para ganar al Lugo (2-1)

El Ourense CF sumó un triunfo que vale su peso en oro luego de derrotar en el derbi gallego al Lugo por dos goles a uno. Una victoria de fe, porque hasta el último minuto creyó en la remontada que además le permite dormir fuera de los puestos de descenso y prolongar en liga el buen momento que está demostrando también en la Copa del Rey este martes.

El derbi comenzó parejo, pero sin mayores ocasiones que un disparo desde la frontal de Ángel Sánchez que se marchó arriba. En el minuto 14 llegó el tanto visitante. Un saque de esquina que el defensa Erik Ruiz que se había sumado al ataque remató de cabeza superando a su par en el punto de penalti y poniendo el 0-1. El gol le sentó mejor a los lucenses ante un Ourense CF que no tenía la fluidez en su juego de otras tardes. Raúl Hernández tuvo un remate de cabeza franco que mandó arriba a los veinte minutos. Poco a poco, fueron a más los azulones que a la media hora, tras una buena jugada de Jerin, remató Di Renzo y salvo un defensa. Y antes del descanso una para cada equipo. En los visitantes, un centro chut de Perero que se fue fuera por poco y en los locales, un nuevo remate de Di Renzo a la media vuelta que se le fue arriba.

En la segunda parte, cambio la decoración. Pablo López refrescó el equipo con Raigal y Fullana y más tarde con Carbonell, que a la postre sería el gran protagonista del encuentro. Antes, el Ourense CF mostró sus intenciones ante un Lugo que reculó para su área y trató de conservar el 0-1 hasta el final, pero que no lo logró.

Los ourensanos, alentados por su público fueron rondando el área, metiendo centros, tratando de triangular, pero sin grandes ocasiones más allá de un nuevo disparo de Ángel Sánchez desviado o una falta directa que sacó Carbonell al borde del área, pero que también se le marchó muy arriba.

Parecía que los de Lolo Escobar podían llevarse los tres puntos, pero el fútbol esta vez fue justo con el Ourense CF que lo buscó hasta el final. Corría el minuto 88 cuando Raigal cedió una pelota desde la izquierda para Jairo Noriega que no se lo pensó dos veces y sacó un latigazo con la izquierda que el meta Marcos Lavín despejó como pudo, y Carbonell muy atento envió el balón al fondo de la red para poner el empate en el marcador.

Y en el 90 llegó la locura. Saque de banda en su propio campo de Hugo Sanz, que Álex Zalaya manda al medio para Jairo Noriega, que conduce y cede en banda derecha, donde Álex Gil controla, avanza y centra al área, donde aparece de nuevo Carbonell para empujar al fondo de la portería lucense. Parecía increíble pero fue verdad. En poco más de un minuto le habían dado la vuelta al partido. Hubo que sufrir en los 7 minutos de añadido, pero bien mereció la pena.