Una Liga de locos

Fiesta por todo lo alto. El Pabellón Marta Domínguez se quedó pequeño para una cita histórica. El Palencia no falló ante el Tarragona y rubricó un trabajado ascenso a la LEB Oro.
Se acabó lo que se daba para el COB y para otros ocho equipos. Los ourensanos acaban la Liga siendo los mejores de los menos malos, es decir a un puesto del play off de ascenso. Pobre y triste bagaje para un equipo que comenzó la temporada con el objetivo del ascenso y sin renunciar a competir por la primera plaza.
Y todo en una Liga plagada de problemas económicos en los clubes y sin dominadores en las pistas. El Palencia acaba como campeón perdiendo diez partidos y alguno de ellos con sonoros bofetones. Segundo quedó el Caja Rioja, que sólo ganó uno en dos meses, de noviembre a enero. El tercero, el HNV, ha luchado con ocho jugadores; el cuarto, el Hospitalet, ha perdido tres de sus cuatro últimos; y el quinto, el Cornellá, llegó a perder cinco consecutivos. De ahí para abajo sólo han estado al día en los cobros Coruña y Qalat, curiosamente los dos descendidos. Cosas de una Liga cada año más igualada, imprevisible y alocada.
A unos ahora les toca soñar con el ascenso en los play off, a otros con enmendar desaguisados para estar la temporada que viene otra vez en la parrilla de salida.

Te puede interesar