Han pasado siete años desde que Manolo Rois dejara la presidente de su querido Club Deportivo Ourense, al que sigue animando como uno más desde la grada 'y con la ilusión que cuanto antes salga del pozo de la Tercera división. Hay que unir y Ourense tiene que responder porque este club es el que nos representa a nivel provincial y nacional con más de 50 años de historia, y para ello se tiene que intentar mantener una estabilidad que parece le falta en lo deportivo y económico'.
El exmandatario rojillo sabe que en la grada se sufre por los resultados 'hasta que el equipo vaya bien, pero cuando estás al frente de un club que económicamente es débil sabes que todos los meses hay que pagar y para eso hay que salir a buscar dinero, publicidad y hacer más socios'.
Manolo Rois las vio de todos los colores cuando presidió la entidad de O Couto y el tema deportivo su gran pena en el último año de gestión 'fue no poder recuperar la Segunda división a la que estuvimos a punto de volver, siendo una categoría impresionante y para una ciudad no digamos lo que ello significa. Cuando jugamos aquella promoción de ascenso donde ascendió el Tarragona, que continúa actualmente en la categoría de plata, sufrimos aquel nefasto arbitraje en Lanzarote que nos lo impidió. Después de ir ganando 0-1, en los últimos cuatro minutos perdimos por sus errores, 2-1. Fue una pena porque hubiese sido una inyección económica ya que recibes el apoyo de la televisión y las quinielas', dijo.
En todo este tiempo alejado de los despachos fue tentado en más de una ocasión para que regresará al Ourense. 'En la vida hay etapas que uno cumple y cuando se termina debes retirarte, y con una edad en la que ya el cuerpo no está para sufrir, lo mejor es descansar, animar y estar desde la grada con el equipo. Por eso, subrayó Rois, hay que dejar trabajar ahora a gente nueva, porque esto es el patrimonio de toda una ciudad'.
No es algo nuevo la escasa implicación con el club. 'A lo largo de su historia siempre hubo problemas y la estabilidad duró en momentos muy puntuales. Mi última etapa fue tranquila, se jugaron cinco promociones, se ascendió a Segunda y nunca hubo problemas de pagos. Y más atrás, recuerda el ex presidente, 'con Jorge Bermello también reinó la calma, pero en el medio hubo unos intervalos de huelgas y denuncias. No cabe duda que es un problema de estudio'.
En el plano deportivo, Manolo Rois cree que se está realizando una temporada maravillosa. 'Están luchando en Tercera división con equipos como el Racing de Ferrol, Pontevedra, Fabril y el Cerceda, que económicamente es muy fuerte. El Ourense hasta ahora está dando la cara y como dice su entrenador se necesitan uno o dos refuerzos ya que la plantilla es muy corta para una temporada muy larga. No creo que haya problemas de jugar la promoción y a ver si este año damos definitivamente el salto añorado a la Segunda B'.
Manolo Rois las vio de todos los colores cuando presidió la entidad de O Couto y el tema deportivo su gran pena en el último año de gestión 'fue no poder recuperar la Segunda división a la que estuvimos a punto de volver, siendo una categoría impresionante y para una ciudad no digamos lo que ello significa. Cuando jugamos aquella promoción de ascenso donde ascendió el Tarragona, que continúa actualmente en la categoría de plata, sufrimos aquel nefasto arbitraje en Lanzarote que nos lo impidió. Después de ir ganando 0-1, en los últimos cuatro minutos perdimos por sus errores, 2-1. Fue una pena porque hubiese sido una inyección económica ya que recibes el apoyo de la televisión y las quinielas', dijo.
En todo este tiempo alejado de los despachos fue tentado en más de una ocasión para que regresará al Ourense. 'En la vida hay etapas que uno cumple y cuando se termina debes retirarte, y con una edad en la que ya el cuerpo no está para sufrir, lo mejor es descansar, animar y estar desde la grada con el equipo. Por eso, subrayó Rois, hay que dejar trabajar ahora a gente nueva, porque esto es el patrimonio de toda una ciudad'.
No es algo nuevo la escasa implicación con el club. 'A lo largo de su historia siempre hubo problemas y la estabilidad duró en momentos muy puntuales. Mi última etapa fue tranquila, se jugaron cinco promociones, se ascendió a Segunda y nunca hubo problemas de pagos. Y más atrás, recuerda el ex presidente, 'con Jorge Bermello también reinó la calma, pero en el medio hubo unos intervalos de huelgas y denuncias. No cabe duda que es un problema de estudio'.
En el plano deportivo, Manolo Rois cree que se está realizando una temporada maravillosa. 'Están luchando en Tercera división con equipos como el Racing de Ferrol, Pontevedra, Fabril y el Cerceda, que económicamente es muy fuerte. El Ourense hasta ahora está dando la cara y como dice su entrenador se necesitan uno o dos refuerzos ya que la plantilla es muy corta para una temporada muy larga. No creo que haya problemas de jugar la promoción y a ver si este año damos definitivamente el salto añorado a la Segunda B'.
