El Entroido se reinventó un día más. Uno de los carnavales del "triángulo máxico" de la capital, el de Seixalbo, no quiso dejar pasar la oportunidad de que sus personajes saludasen a los vecinos en los balcones, a falta de fiesta en la plaza. Paquita, Nicanor y Vicentiño pasearon en camilla por el pueblo, acompañados del "Doctor Simeone" . Los de Seixalbo hicieron su particular homenaje a los sanitarios, con un guiño en el carro que daba las gracias a los héroes de la pandemia. En A Lonia tiraron de originalidad con las fachadas de las casas decoradas de ambiente entroideiro y en Loiro (Barbadás) dejaron mecos artesanales por las esquinas. A Pita de Eiroás y Frei Canedo de A Ponte también tendrán su momento. Están trabajando en eventos por internet casi a diario. El Frei Canedo ya salió en procesión, silenciosa, por A Ponte. Las Pitas esperan a este martes para su gran evento: la boda. Será virtual.
Y el ambiente en la calle siguió con los ourensanos disfrazados para poner la nota de color a un Entroido sin fiesta, pero con mucho espíritu y esperando al 2022.