Al ritmo de los tambores y la dulzaina, varios cientos de 'indignados' han formado esta tarde una cadena humana en espiral en la plaza del Ayuntamiento de Valencia, que ha llegado a dar tres vueltas debido a la cantidad de personas que se ha sumado a la iniciativa.
'Estamos demostrando que sabemos hacer las cosas y las hacemos bien', ha asegurado David, miembro de la comisión de acción del movimiento 15-M de Valencia que, micrófono en mano, instaba a todos los presentes a que se unieran a la cadena humana que bailaba al ritmo de la dolçaina y la popular pieza 'La manta al coll'.
Una media hora antes, los 'indignados' de la plaza del Ayuntamiento, renombrada por ellos desde el pasado viernes 'plaça del 15 de maig', tenían previsto realizar la cadena humana alrededor de Palau de la Generalitat, hasta el que pensaban acudir 'por la acera y sin ningún tipo de manifestación o protesta'.
Según informaron más tarde, agentes del Cuerpo Nacional de Policía les confirmaron que 'no contaban con el permiso oportuno' para llevar a cabo 'esa manifestación', por lo que si finalmente se realizaba, podrían sufrir una 'sanción administrativa'.
Por ello, se ha comunicado a todos los presentes en la plaza la situación en la que se encontraban y se ha propuesto la iniciativa de llevar a cabo la cadena humana 'dentro de la misma plaza', donde 'sí había autorización' de manifestarse.
Sin embargo, miembros de la comisión de acción han confirmado a EFE que pedirán autorización 'próximamente' para poder llevar a cabo 'la cadena humana alrededor del Palau de la Generalitat'.
A la cadena humana se han incorporado personas de todas las edades que han coreado himnos como 'no nos miréis, ¡únete!' o 'manos arriba, esto es un atraco', y han intentado en más de tres ocasiones llevar a cabo una 'ola' entre todos.
Posteriormente, los 'indignados' se han acercado hacia uno de los extremos de la plaza, donde, de cara a la Casa Consistorial y frente a tres policías locales, han comenzado a vitorear y a instar a los agentes a que se unieran a su protesta.
A última hora de la tarde, la 'número dos' de la candidatura autonómica de Compromís, Mónica Oltra, se ha pasado por la plaza del Ayuntamiento, donde ha afirmado a EFE que la iniciativa del 15-M es 'un movimiento de futuro que sienta las bases de una nueva democracia, con un sistema económico que ponga las personas en el centro de la vida social'.
Una media hora antes, los 'indignados' de la plaza del Ayuntamiento, renombrada por ellos desde el pasado viernes 'plaça del 15 de maig', tenían previsto realizar la cadena humana alrededor de Palau de la Generalitat, hasta el que pensaban acudir 'por la acera y sin ningún tipo de manifestación o protesta'.
Según informaron más tarde, agentes del Cuerpo Nacional de Policía les confirmaron que 'no contaban con el permiso oportuno' para llevar a cabo 'esa manifestación', por lo que si finalmente se realizaba, podrían sufrir una 'sanción administrativa'.
Por ello, se ha comunicado a todos los presentes en la plaza la situación en la que se encontraban y se ha propuesto la iniciativa de llevar a cabo la cadena humana 'dentro de la misma plaza', donde 'sí había autorización' de manifestarse.
Sin embargo, miembros de la comisión de acción han confirmado a EFE que pedirán autorización 'próximamente' para poder llevar a cabo 'la cadena humana alrededor del Palau de la Generalitat'.
A la cadena humana se han incorporado personas de todas las edades que han coreado himnos como 'no nos miréis, ¡únete!' o 'manos arriba, esto es un atraco', y han intentado en más de tres ocasiones llevar a cabo una 'ola' entre todos.
Posteriormente, los 'indignados' se han acercado hacia uno de los extremos de la plaza, donde, de cara a la Casa Consistorial y frente a tres policías locales, han comenzado a vitorear y a instar a los agentes a que se unieran a su protesta.
A última hora de la tarde, la 'número dos' de la candidatura autonómica de Compromís, Mónica Oltra, se ha pasado por la plaza del Ayuntamiento, donde ha afirmado a EFE que la iniciativa del 15-M es 'un movimiento de futuro que sienta las bases de una nueva democracia, con un sistema económico que ponga las personas en el centro de la vida social'.
