El PNV se marca como objetivos la próxima legislatura 'petrificar' la paz y crear un nuevo estatus político para Euskadi en 2015
El candidato del PNV al Congreso por Alava, Emilio Olabarría, ha afirmado que votar a Amaiur estas elecciones es 'un voto a ciegas' y 'un acto de fe', porque no se sabe qué propone. El PNV se marca como objetivo la próxima legislatura 'petrificar' la paz y crear un nuevo estatus político para Euskadi en 2015.
Olabarria se ha referido a la nueva coalición electoral soberanista que concurre a estos comicios y ha señalado que 'carece de programa', se desconocen sus candidatos y sólo se sabe que defienden el derecho de autodeterminación.
'No conocemos todo lo demás, no sé que plantean para hacer frente al empleo, a la educación y a la sanidad. El voto a Amaiur es un voto a ciegas, es prácticamente un acto de fe y, ante una organización que se basa sólo en registros puramente emocionales y no en registros políticos racionales, no sabemos qué niveles de concertación podríamos tener con ellos ni si van a tener siquiera representación parlamentaria', ha explicado.
En ese sentido, ha insistido en que le 'cuesta mucho creer' que 'en un país tan politizado y con un espíritu crítico muy consolidado como es Euskadi, se pueda votar a ciegas a una organización que no se sabe qué propone'.
Sobre la celebración este jueves del Día de la Memoria sin consenso entre todos los partidos, el dirigente jeltzale ha señalado que, aunque la normalización 'se empieza a consolidar' desde el anuncio de ETA, no está 'lo suficientemente asentada' y provoca 'problemas de esta naturaleza'.
Desde este punto de vista, ha señalado que los actos convocados hoy están 'un tanto desesctructurados y con una cierta carencia de legitimidad' por la falta de consenso entre partidos en relación a 'cómo se tiene que proceder para reparar a las víctimas y cómo desactivar el ordenamiento jurídico de excepción que se ha hecho para acosar a ETA'.
'SEDIMENTAR Y PETRIFICAR LA PAZ'
En ese sentido, ha señalado que su partido se marca como objetivos para la próxima legislatura 'sedimentar y petrificar' la paz y la normalización política. Otro de sus objetivos es poner en marcha en 2015 un nuevo estatus político para Euskadi, al considerar que el Estatuto de Gernika es un instrumento 'políticamente amortizado', ya que el Gobierno español 'no considera negociables' competencias que quedan por transferir, como la gestión del régimen económico de la Seguridad Social o algunas vinculadas al mercado laboral.
Según ha dicho, su propuesta de nuevo estatus requiere de un trabajo previo de negociación, consenso y articulación de mayorías que permitan normativamente que 'se pueda inocular en el ordenamiento jurídico el reconocimiento del carácter plurinacional del Estado y el derecho a decidir' la relación con el Estado.
Olabarria se ha referido a la nueva coalición electoral soberanista que concurre a estos comicios y ha señalado que 'carece de programa', se desconocen sus candidatos y sólo se sabe que defienden el derecho de autodeterminación.
'No conocemos todo lo demás, no sé que plantean para hacer frente al empleo, a la educación y a la sanidad. El voto a Amaiur es un voto a ciegas, es prácticamente un acto de fe y, ante una organización que se basa sólo en registros puramente emocionales y no en registros políticos racionales, no sabemos qué niveles de concertación podríamos tener con ellos ni si van a tener siquiera representación parlamentaria', ha explicado.
En ese sentido, ha insistido en que le 'cuesta mucho creer' que 'en un país tan politizado y con un espíritu crítico muy consolidado como es Euskadi, se pueda votar a ciegas a una organización que no se sabe qué propone'.
Sobre la celebración este jueves del Día de la Memoria sin consenso entre todos los partidos, el dirigente jeltzale ha señalado que, aunque la normalización 'se empieza a consolidar' desde el anuncio de ETA, no está 'lo suficientemente asentada' y provoca 'problemas de esta naturaleza'.
Desde este punto de vista, ha señalado que los actos convocados hoy están 'un tanto desesctructurados y con una cierta carencia de legitimidad' por la falta de consenso entre partidos en relación a 'cómo se tiene que proceder para reparar a las víctimas y cómo desactivar el ordenamiento jurídico de excepción que se ha hecho para acosar a ETA'.
'SEDIMENTAR Y PETRIFICAR LA PAZ'
En ese sentido, ha señalado que su partido se marca como objetivos para la próxima legislatura 'sedimentar y petrificar' la paz y la normalización política. Otro de sus objetivos es poner en marcha en 2015 un nuevo estatus político para Euskadi, al considerar que el Estatuto de Gernika es un instrumento 'políticamente amortizado', ya que el Gobierno español 'no considera negociables' competencias que quedan por transferir, como la gestión del régimen económico de la Seguridad Social o algunas vinculadas al mercado laboral.
Según ha dicho, su propuesta de nuevo estatus requiere de un trabajo previo de negociación, consenso y articulación de mayorías que permitan normativamente que 'se pueda inocular en el ordenamiento jurídico el reconocimiento del carácter plurinacional del Estado y el derecho a decidir' la relación con el Estado.
