ETA ha asesinado a cinco ourensanos y secuestró a dos personas en la provincia de Ourense

Las víctimas de la banda desconfían de los terroristas

Varias personas leen en un kiosko de San Sebastián las portadas de los periódicos de difusión nacional, así como los diarios de Navarra y el País Vasco (Foto: EFE)
El anuncio de ETA de que abandona definitivamente su actividad terrorista satisface con matices a las víctimas de sus atentados, entre ellas las ourensanas, en una provincia donde la violencia etarra se cobró la vida de cinco personas e hirió a otras siete; incluso operó en Ourense, vía secuestro, en dos ocasiones, cuando retuvo al empresario Eulogio Gómez Franqueira, fundador de Coren, y al vasco Jacinto Zuleika, que había fijado su residencia en la provincia para eludir el pago del impuesto revolucionario.
Responsables de asociaciones de víctimas consultados aplaudían el cese de la violencia pero consideraban que ello debe llevar aparejada la entrega del armamento y el anuncio no puede desembocar en una amnistía. Incluso el secretario de la Asociación de Víctimas del Terrorismo en Ourense, Juan Salgado, tachó el comunicado de 'burla', asegurando que si ETA está diciendo la verdad, 'debe entregar las armas sin ninguna contrapartida'. Teme, pues, que con unas nuevas elecciones generales a la vista, haga como en otras ocasiones, 'anuncios que luego no cumple'. Salgado, vecino de Barrocás (Ourense), resultó herido en un atentado siendo guardia civil en Navarra. No guarda rencor, pero tampoco olvida: 'Las víctimas estamos ahí y creo que ya hicimos demasiadas concesiones. Sólo pedimos que los que hicieron daño paguen por ello, nada más'.

El anuncio etarra no sorprendió al presidente de Víctimas del Terroristo 'Santiago Apóstol' de Galicia, Ángel Penas, que también enmarca la decisión en las próximas elecciones. 'Lo deseable no es sólo que abandonen la lucha armada, sino que entreguen las armas', explica. Penas tiene contabilizadas 30 víctimas del terrorismo de ETA residiendo en el territorio gallego y no da credibilidad a los anuncios de la banda, aunque reconoce su satisfacción por el fin de la violencia. Es más, se muestra partidario de hacer concesiones siempre y cuando 'se integren en la sociedad, expongan sus ideas y luchen por llevarlas a cabo jugando limpio. Eso sería lo deseable', piensa.

Vicente Blanco reside en la ciudad, y es víctima de ETA desde el 20 de enero del 1986, cuando, siendo guardia civil, sufrió una atentado en el País Vasco. Ayer no creía el anuncio de la banda. 'Lo único que pretenden es ganar tiempo para recomponerse. Hay una elecciones y pretenden hacer campaña. Después, dependiendo del partido que gane, seguro que buscan una excusa para volver', dijo. Blanco rechaza cualquier tipo de negociación con la banda terrorista, 'porque esto no es ningún conflicto armado. Hay una gente que mata y en cualquier Estado de Derecho paga por ello'.


FINAL DEFINITIVO

Desde el resto del país, el mensaje de las víctimas era similar: este no es aún el final definitivo que ellos esperan. 'ETA ha anunciado que deja las armas, que abandona la lucha armada, pero no se disuelve', advierte el presidente de la plataforma Voces contra el Terrorismo (VCT), Francisco José Alcaraz, que añade que la banda terrorista pretende 'conseguir mediante la negociación lo que no ha conseguido matando durante décadas'.

Con Alcaraz coincide el vicepresidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), José Marco, que también ha pedido la 'disolución' de ETA y que la Justicia juzgue a los terroristas. Marco reclama a la organización que se disuelva, que entregue sus arsenales y que los 'delincuentes' sean puestos a disposición judicial. También la presidenta de la AVT, Ángeles Pedraza, censura que ETA aluda a la 'confrontación armada' y recuerda que 'sólo han matado ellos'.

Irene Villa, quien sufrió la amputación de las piernas tras la explosión de una bomba de ETA cuando tenía 12 años, dijo que es un paso más, pero que de los terroristas se fía poco. Villa, de 32 años, añadió que no hay nada 'más soñado y deseado' que 'nunca nadie tenga que pasar por lo que muchos hemos pasado, nunca nadie tenga que despertarse con una bomba debajo de su coche o sin su padre, asesinado'.

Te puede interesar