La gestión de los espacios naturales de Ourense

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photo_camera Espacios naturales en Ourense.

No podemos planificar la estrategia de la provincia sin tener en cuenta la gestión de la riqueza de su entorno natural

Durante el pasado año 2014 he tenido la oportunidad de realizar un análisis de la información económica de los espacios naturales protegidos de España (parques nacionales y parques naturales del Estado). Como ourensano, resulta incómodo descubrir el “abandono” que en materia de gestión socioeconómica (e incluso medioambiental) se vive en los 3 parques naturales con los que contamos en la provincia (sin incluir otras figuras de protección de igual o mayor interés como los espacios Red Natura 2000, entre otros).


En primer lugar, destacar que si contamos con espacios naturales protegidos en Ourense será porque en ellos se encuentran algunos elementos dignos de conservar desde el punto de vista de la biodiversidad y de los ámbitos social y cultural que en ellos, como lugares con presencia del ser humano, conviven. Pero también es cierto que el abandono socioeconómico de estos lugares, unidos a una falta de planificación y gestión, hacen que parezca poco digno de una provincia de interior como la nuestra, que dice apostar por un desarrollo turístico de calidad, el contar con este tipo de lugares en semejante situación. Y la “crisis” no sirve de excusa para todo.

INFORMACIÓN ECONÓMICA Y TRANSPARENCIA EN LA GESTIÓN
En este sentido, analizando la transparencia de la información económica a través del principal documento de gestión de los espacios naturales protegidos españoles (la Memoria de Gestión Anual de los diferentes parques nacionales y naturales del país), se llega a la terrible conclusión de que ningún parque natural de la provincia de Ourense (Serra da Enciña da Lastra, Montes do Invernadeiro y Baixa Limia-Serra do Xurés) presenta información económica de su gestión. Por tanto, esto significa que o no se está invirtiendo nada o no contamos con información transparente de lo que se está haciendo con el dinero público en los lugares indicados, con lo que ello supone. Y esto es más preocupante de lo que parece.


Profundizando un poco más en el análisis se descubre que esto es un problema que en Galicia, donde contando con 6 parques naturales, sólo 1 de ellos (Monte Aloia) presenta información económica pública con cierta transparencia (lo que supone que el 84% de los parques naturales gallegos no presentan información de su gestión económica).
Con todo ello, lo que se quiere poner de manifiesto es que dentro de la elaboración de los presupuestos anuales a nivel estatal, autonómico y provincial se establecen una serie de partidas y programas con dotación económica presupuestaria para estos lugares que posteriormente se ignoran a la información o curiosidad del público en general puesto que, sin esos documentos de gestión anual (que representan un resumen de las actuaciones llevadas a cabo, del dinero empleado y en qué se empleó,…) no podemos saber si se ha hecho algo o no con ese dinero inicial y ni mucho menos si lo que se hace es con objetivos relacionados con la idea de conservación y disfrute de estos lugares.

DESARROLLO DEL RURAL Y ORIENTACIÓN ESTRATÉGICA
Este problema se podría extrapolar a otros ámbitos del presupuesto pero parece interesante resaltar que no podemos estar hablando de desarrollo socioeconómico del medio rural cuando estamos sufriendo un despoblamiento muy fuerte del mismo, una falta de oportunidades y de financiación o inversión evidentes y aún más un descontrol total por parte de nuestras administraciones en materia de gestión. Es un pilar esencial en la estrategia de la proincia que afecta a su imagen y a su potencial de futuro en muchos sectores, entre ellos el turismo natural con una perspectiva sostenible y de largo, pero también a nuevas modalidades de aprovechamiento equilibrado de nuestros bosques y de cultivos tantos tradicionales como ecológicos, por no hablar de las propias políticas de conservación y respeto del entorno con la vista puesta en las próximas generaciones.


El ejemplo de las áreas naturales protegidas de nuestra provincia resulta difícil de explicar en otras comunidades y provincias de nuestro entorno y mucho más, a nivel internacional. No podemos planificar con carácter estratégico una provincia que destaca por su paisaje y su naturaleza, abandonando la gestión de estas riquezas, puesto que estaríamos hipotecando el futuro de un territorio ya de por sí envejecido, en el que los jóvenes no tengan más opción que resignarse a un futuro peor.
La legislación estatal comienza a incorporar la transparencia económica para el conjunto de las administraciones públicas como exigencia básica (en línea con los países de nuestro entorno), las conductas de buen gobierno y gestión, etc., que siendo puntos muy importantes no son condición única ni suficiente para la mejora integral, aunque sí un punto de inflexión que sólo alcanzará su correcto camino si las personas que estén detrás de las políticas públicas y su gestión actúan con responsabilidad.


Será solamente bajo este contexto y condición cuando los recursos provinciales destaquen. No podemos ir contra la tendencia general de un creciente proceso de urbanización ideológica que será finalmente el que provoque una valorización irracional y apresurada del contexto natural y paisajístico de Ourense.
Señores y señoras, es el momento de mirar hacia nuestra naturaleza con una visión un poco más avanzada. Los cambios se producen con rapidez y no podemos dejar que el conocimiento de la realidad provincial sólo sea valorada por los que vienen y no por los que se quedan porque sería un mal ejemplo de desarrollo socioeconómico provincial.

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