El debate de los presupuestos de la Xunta para 2010 concluyó en el seno de la Comisión de Economía del Pazo do Hórreo con unas 1.400 enmiendas de la oposición --entre articulado y por secciones-- que se mantienen vivas para su discusión en el pleno, que está previsto para los días 22 y 23 de este mes.
De este modo, el balance global se salda con 20 enmiendas al articulado aprobadas, 17 de ellas del PPdeG y tres de los socialistas; y con 59 cambios en las diferentes secciones, de los que 57 fueron motivados por el PPdeG y las otras dos una por cada grupo de la oposición.
En el ámbito contrario, los votos de los 'populares' echaron abajo a lo largo de los últimos tres días un total de 33 iniciativas socialistas y 12 de los nacionalistas que se presentaron para cambiar el articulado del proyecto de ley. Por secciones, 752 del PSdeG y 600 del BNG fueron votadas en contra.
Así las cosas, el portavoz en la materia del Grupo Parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, aseguró que se deja 'la puerta abierta' a las incorporaciones, pero avisó de que, con las enmiendas que se han presentado, 'hay poco margen de maniobra'. 'Es difícil reducir más gasto corriente, teniendo en cuenta la consolidación que hizo el anterior gobierno del gasto corriente', explicó, tras la comisión, en declaraciones a los periodistas.
CONCLUSIONES FINALES
Como es tradicional, los grupos realizaron sendos alegatos finales después del debate de las enmiendas al articulado y por secciones y en los que el PPdeG elogió que el proyecto de presupuestos es el que 'necesita Galicia', porque es 'realista, austeros, más transparentes y apuran el margen' de endeudamiento para aplicar una política 'anticíclica' que permita salir de la crisis.
En el extremo contrario se situó la oposición de manera que, en palabras de la socialista María José Caride, las cuentas 'no son las que resolverán la situación de Galicia'. 'Dejan unas cuentas que envían un mensaje a la sociedad de una situación dura, mala, pesimista y de resignación', ilustró la diputada en declaraciones a los medios de comunicación al concluir la comisión.
En el seno del órgano parlamentario, durante su exposición final, Caride puso de relieve que 'otro presupuesto es posible' y, para ello, la Xunta 'tiene que dejar de estar instalada en la pasividad' y, por tanto, 'actuar'. A modo de ejemplo, se refirió a las infraestructuras y al 'abandono de las acciones proactivas' justo cuando 'la economía va mal'.
Además, alertó de que el PP optó por 'dejar en manos de la iniciativa privada la construcción de infraestructuras hospitalarias', con el 'riesgo' que, a su juicio, supone esta decisión por dejar los 'peores servicios para los ciudadanos'.
'NAVE QUE LE FALTAN REMOS Y VELAS'
Por su parte, el portavoz de Economía del BNG, Fernando Blanco, comparó los futuros presupuestos gallegos con una 'nave a la que le faltan remos, capacidad y velas' para dar respuestas a las necesidades de los ciudadanos. 'Son unos malos presupuestos que no cumplen los objetivos de incentivar el empleo e impulsar los sectores productivos', recalcó a preguntas de los medios.
En este contexto, el portavoz del Grupo Parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, alegó, en su discurso final en comisión, que 'no hay austeridad' en las cuentas, que llamó de la 'propaganda' por los eslóganes con los que fue presentado pero que 'no se cumple' en el diseño de las partidas.
Así, concluyó que 'lo que se está viendo día a día es la privatización de los servicios públicos en las infraestructuras y en su gestión', frente a la afirmación de que se 'blinda' el gasto social y puso de manifiesto que las partidas 'bajan en educación y sanidad' y hay una 'subida muy pequeña en dependencia'. 'No vemos la salida de la crisis', aseveró.
Por contra, Puy Fraga destacó que 'si algo quedó claro' es que, con la solución 'tan drástica en políticas anticíclicas' de la Xunta, la postura de la oposición 'queda reducida a inventarse' que va a haber más ingresos de los que habrá realmente.
Asimismo, destacó que, aunque por primera vez el presupuesto baje, las cuentas son 'las más sociales' de la historia, con un 70 por ciento de gasto en los servicios públicos. A mayores, lamentó las quejas por el aumento del gasto corriente, puesto que --constató-- se 'incrementa en un dos por ciento', derivado de las subidas salariales y de 'las decisiones del bipartito en el pasado' que 'consolidaron una media de 200 millones de euros' anuales.
ARTICULADO
Uno de los debates que se dio estos días y que ya había sido motivo de discusión en los últimos meses giró en torno a la rebaja de los salarios de los altos cargos, que finalmente será del 3 por ciento que propuso el PPdeG. Recibió el voto de abstención de la oposición, dado que los socialistas pedían un 5 por ciento de bajada y los nacionalistas optaron por esta vía al haber dos propuestas distintas.
Por otro lado, los grupos del PPdeG y del PSdeG echaron abajo la enmienda a los presupuestos de la Xunta que presentó el BNG para suprimir el plus de altos cargos aprobado en la legislatura pasada y cuyo coste los nacionalistas calculan entre 1,5 y los dos millones de euros.
A mayores, otro de los debates suscitados en el seno de la comisión se centró en el complemento a las pensiones no contributivas, de manera que se aprobó la enmienda del PPdeG que concreta en 206 euros este suplemento para las prestaciones más bajas.
Los nacionalistas también habían presentado una enmienda en este sentido, pero que pedía definir en 11 millones de euros la cuantía total para este fin, pero fue rechazada por los 'populares', quienes también sacaron adelante que los ayuntamientos puedan destinar partidas del fondo extraordinario para gasto corriente.
OTRAS APROBACIONES
Asimismo, fueron aprobadas cuatro enmiendas del PSdeG relativas a destinar el ahorro en el transporte escolar a la mejora del sistema educativo y para que las actuaciones excepcionales de la Xunta en caso de emergencia o catástrofe cuenten con una declaración previa de la Administración autonómica.
También salió adelante la propuesta de no incrementar los créditos autorizados inicialmente en los casos de los gastos dedicados a acciones protocolarias y reuniones, conferencias y cursos. Por su parte, todas las enmiendas del BNG fueron rechazadas, entre las que se encontraban, además de las citadas, una propuesta para introducir mayor transparencia y reducir plazos en documentación de corte económico.
En el ámbito contrario, los votos de los 'populares' echaron abajo a lo largo de los últimos tres días un total de 33 iniciativas socialistas y 12 de los nacionalistas que se presentaron para cambiar el articulado del proyecto de ley. Por secciones, 752 del PSdeG y 600 del BNG fueron votadas en contra.
Así las cosas, el portavoz en la materia del Grupo Parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, aseguró que se deja 'la puerta abierta' a las incorporaciones, pero avisó de que, con las enmiendas que se han presentado, 'hay poco margen de maniobra'. 'Es difícil reducir más gasto corriente, teniendo en cuenta la consolidación que hizo el anterior gobierno del gasto corriente', explicó, tras la comisión, en declaraciones a los periodistas.
CONCLUSIONES FINALES
Como es tradicional, los grupos realizaron sendos alegatos finales después del debate de las enmiendas al articulado y por secciones y en los que el PPdeG elogió que el proyecto de presupuestos es el que 'necesita Galicia', porque es 'realista, austeros, más transparentes y apuran el margen' de endeudamiento para aplicar una política 'anticíclica' que permita salir de la crisis.
En el extremo contrario se situó la oposición de manera que, en palabras de la socialista María José Caride, las cuentas 'no son las que resolverán la situación de Galicia'. 'Dejan unas cuentas que envían un mensaje a la sociedad de una situación dura, mala, pesimista y de resignación', ilustró la diputada en declaraciones a los medios de comunicación al concluir la comisión.
En el seno del órgano parlamentario, durante su exposición final, Caride puso de relieve que 'otro presupuesto es posible' y, para ello, la Xunta 'tiene que dejar de estar instalada en la pasividad' y, por tanto, 'actuar'. A modo de ejemplo, se refirió a las infraestructuras y al 'abandono de las acciones proactivas' justo cuando 'la economía va mal'.
Además, alertó de que el PP optó por 'dejar en manos de la iniciativa privada la construcción de infraestructuras hospitalarias', con el 'riesgo' que, a su juicio, supone esta decisión por dejar los 'peores servicios para los ciudadanos'.
'NAVE QUE LE FALTAN REMOS Y VELAS'
Por su parte, el portavoz de Economía del BNG, Fernando Blanco, comparó los futuros presupuestos gallegos con una 'nave a la que le faltan remos, capacidad y velas' para dar respuestas a las necesidades de los ciudadanos. 'Son unos malos presupuestos que no cumplen los objetivos de incentivar el empleo e impulsar los sectores productivos', recalcó a preguntas de los medios.
En este contexto, el portavoz del Grupo Parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, alegó, en su discurso final en comisión, que 'no hay austeridad' en las cuentas, que llamó de la 'propaganda' por los eslóganes con los que fue presentado pero que 'no se cumple' en el diseño de las partidas.
Así, concluyó que 'lo que se está viendo día a día es la privatización de los servicios públicos en las infraestructuras y en su gestión', frente a la afirmación de que se 'blinda' el gasto social y puso de manifiesto que las partidas 'bajan en educación y sanidad' y hay una 'subida muy pequeña en dependencia'. 'No vemos la salida de la crisis', aseveró.
Por contra, Puy Fraga destacó que 'si algo quedó claro' es que, con la solución 'tan drástica en políticas anticíclicas' de la Xunta, la postura de la oposición 'queda reducida a inventarse' que va a haber más ingresos de los que habrá realmente.
Asimismo, destacó que, aunque por primera vez el presupuesto baje, las cuentas son 'las más sociales' de la historia, con un 70 por ciento de gasto en los servicios públicos. A mayores, lamentó las quejas por el aumento del gasto corriente, puesto que --constató-- se 'incrementa en un dos por ciento', derivado de las subidas salariales y de 'las decisiones del bipartito en el pasado' que 'consolidaron una media de 200 millones de euros' anuales.
ARTICULADO
Uno de los debates que se dio estos días y que ya había sido motivo de discusión en los últimos meses giró en torno a la rebaja de los salarios de los altos cargos, que finalmente será del 3 por ciento que propuso el PPdeG. Recibió el voto de abstención de la oposición, dado que los socialistas pedían un 5 por ciento de bajada y los nacionalistas optaron por esta vía al haber dos propuestas distintas.
Por otro lado, los grupos del PPdeG y del PSdeG echaron abajo la enmienda a los presupuestos de la Xunta que presentó el BNG para suprimir el plus de altos cargos aprobado en la legislatura pasada y cuyo coste los nacionalistas calculan entre 1,5 y los dos millones de euros.
A mayores, otro de los debates suscitados en el seno de la comisión se centró en el complemento a las pensiones no contributivas, de manera que se aprobó la enmienda del PPdeG que concreta en 206 euros este suplemento para las prestaciones más bajas.
Los nacionalistas también habían presentado una enmienda en este sentido, pero que pedía definir en 11 millones de euros la cuantía total para este fin, pero fue rechazada por los 'populares', quienes también sacaron adelante que los ayuntamientos puedan destinar partidas del fondo extraordinario para gasto corriente.
OTRAS APROBACIONES
Asimismo, fueron aprobadas cuatro enmiendas del PSdeG relativas a destinar el ahorro en el transporte escolar a la mejora del sistema educativo y para que las actuaciones excepcionales de la Xunta en caso de emergencia o catástrofe cuenten con una declaración previa de la Administración autonómica.
También salió adelante la propuesta de no incrementar los créditos autorizados inicialmente en los casos de los gastos dedicados a acciones protocolarias y reuniones, conferencias y cursos. Por su parte, todas las enmiendas del BNG fueron rechazadas, entre las que se encontraban, además de las citadas, una propuesta para introducir mayor transparencia y reducir plazos en documentación de corte económico.
