Romeu considera necesario revisarlos, mientras Cerviño dice que 'son imprescindibles'

División en el PSdeG para valorar los pactos con el BNG

El diputado socialista Francisco Cerviño manifestó ayer que los pactos 'son imprescindibles desde la perspectiva del electorado de izquierdas', y aseguró que se trata de una opinión 'ampliamente compartida' por el PSOE y por los militantes.
Cerviño hizo estas declaraciones al ser preguntado acerca de las opiniones del ex conselleiro de Presidencia José Luis Mendez Romeu en su blog, en las que sugiere que el PSdeG debe revisar sus alianzas con el BNG, tanto a nivel municipal como autonómico.

El diputado socialista afirmó que los pactos 'funcionaron bien hasta ahora' y recordó que la izquierda 'pactó' los ayuntamientos, tanto en Galicia como en España, desde el año 1979 'sin interrupción'.

'Esa fue siempre la política, y cuando no fue así en algunas elecciones autonómicas, Izquierda Unida lo pagó carísimo' agregó.

Cerviño declinó polemizar sobre esta cuestión con su 'compañero y amigo' y aseguró que Méndez Romeu, 'que es una persona inteligente y con una brillante y larga trayectoria en puestos destacadísimos del PSOE y, por cierto, en gobiernos de coalición, conoce perfectamente esta situación'.

El diputado socialista apuntó que 'son los propios alcaldes los que deberían responder a esta cuestión, ya que son ellos quienes tienen una posición 'bien clara' sobre los pactos y sobre cómo están funcionando.

Asimismo, consideró que los que apuestan por que gobierne la lista más votada olvidan que 'éste es un régimen parlamentario y no una democracia presidencialista', y, por lo tanto, 'tan legítimo es una cosa como la otra'.

Francisco Cerviño concluyó que 'será el electorado en conjunto quien decida quien gobierna en cada momento, y serán los líderes locales y la dirección del partido quien tome decisiones'.

Por otra parte, acusó al presidente de la Xunta de 'acelerar la muerte del gallego', a la vez que ha criticado las declaraciones del líder del Ejecutivo en las que acusaba a la Real Academia Galega (RAG) de ser 'el brazo de una ideología' para apuntarle que 'el arreglo de un tejado no le va a callar la boca a los académicos'.

Reclamó a Núñez Feijóo que 'deje de agredir a las instituciones que no le bailan el agua y que no se dejan comprar', en referencia a sus declaraciones sobre la Real Academia.

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