El juez instructor mantuvo ayer la imputación por los presuntos delitos de cohecho y tráfico de influencias contra el exdiputado autonómico del PPdeG Javier Escribano y el empresario Fermín Duarte, éste último por sospechas de haber regalado un coche de lujo al primero a cambio de interceder por su empresa ante la Xunta de Galicia, según la Policía. Duarte y Escribano, imputados de la denominada Operación Arena, fueron citados a las diez de la mañana en el Juzgado de Instrucción número 3 de Ferrol para prestar declaración por el juez que instruye el asunto, cuya investigación comenzó en mayo del 2007.
'Ambos han negado los hechos que se les imputan', apuntaron fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), y Escribano declaró a los periodistas que es 'absolutamente inocente'. El exparlamentario autonómico se mostró 'muy satisfecho' por haber podido declarar y por 'haber aportado la documentación' que, según él, muestra su inocencia.
El empresario aseguró estar 'indignado' por su imputación, mientras que su abogado, Darío Díaz, destacó la 'mala suerte' de su cliente por haber sido implicado en un tema que 'ha sido utilizado políticamente'. El letrado indicó su intención de pedir el archivo del caso al entender que únicamente hay un 'problema administrativo' por las cautelas que la Xunta, a través de la Consellería de Medio Ambiente, introdujo para la venta de un árido supuestamente reciclado que vendía la constructora Manmer, propiedad de Duarte.
DECLARACIÓN JUDICIAL
El exdiputado autonómico llegó al juzgado poco después de las nueve y media, aparentemente tranquilo, acompañado por su letrado, y minutos después lo hizo Duarte, también con su abogado. Escribano fue el primero en prestar declaración ante el juez instructor, Alejandro Morán Llordén, y la cita se prolongó tres horas y media.
Según el TSXG, el político respondió a todas las preguntas, tanto de la Fiscalía como de la defensa, pero no a todas las del magistrado. El exdiputado presentó diversa documentación que 'queda pendiente de análisis por el titular del juzgado', añadieron fuentes del TSXG, mientras que el empresario declaró más de una hora y 'respondió a todas las preguntas'.
Escribano presentó la renuncia a su escaño en el Parlamento gallego el 29 de octubre, antes de que su imputación fuese divulgada por los medios de comunicación, y pocos días antes del inicio de la campaña para las elecciones generales.
La Operación Arena comenzó en mayo de 2011 tras una denuncia de la patronal Asociación gallega de áridos (AGA) contra Manmer, una constructora que importaba áridos de origen asfáltico de Holanda como producto reciclado con certificación europea con el sello CE y los descargaba en el puerto exterior de Ferrol. Las escuchas telefónicas ordenadas por la investigación judicial a Duarte llevaron a la brigada policial hasta Escribano, entonces diputado en el Parlamento de Galicia.
En una de las conversaciones, el empresario dice haber 'regalado' un Porsche a cambio de algunas gestiones ante el Gobierno gallego. El coche se transfirió a nombre de una familiar de Escribano, quien dijo haberlo adquirido a Duarte por 10.360 euros.
El empresario aseguró estar 'indignado' por su imputación, mientras que su abogado, Darío Díaz, destacó la 'mala suerte' de su cliente por haber sido implicado en un tema que 'ha sido utilizado políticamente'. El letrado indicó su intención de pedir el archivo del caso al entender que únicamente hay un 'problema administrativo' por las cautelas que la Xunta, a través de la Consellería de Medio Ambiente, introdujo para la venta de un árido supuestamente reciclado que vendía la constructora Manmer, propiedad de Duarte.
DECLARACIÓN JUDICIAL
El exdiputado autonómico llegó al juzgado poco después de las nueve y media, aparentemente tranquilo, acompañado por su letrado, y minutos después lo hizo Duarte, también con su abogado. Escribano fue el primero en prestar declaración ante el juez instructor, Alejandro Morán Llordén, y la cita se prolongó tres horas y media.
Según el TSXG, el político respondió a todas las preguntas, tanto de la Fiscalía como de la defensa, pero no a todas las del magistrado. El exdiputado presentó diversa documentación que 'queda pendiente de análisis por el titular del juzgado', añadieron fuentes del TSXG, mientras que el empresario declaró más de una hora y 'respondió a todas las preguntas'.
Escribano presentó la renuncia a su escaño en el Parlamento gallego el 29 de octubre, antes de que su imputación fuese divulgada por los medios de comunicación, y pocos días antes del inicio de la campaña para las elecciones generales.
La Operación Arena comenzó en mayo de 2011 tras una denuncia de la patronal Asociación gallega de áridos (AGA) contra Manmer, una constructora que importaba áridos de origen asfáltico de Holanda como producto reciclado con certificación europea con el sello CE y los descargaba en el puerto exterior de Ferrol. Las escuchas telefónicas ordenadas por la investigación judicial a Duarte llevaron a la brigada policial hasta Escribano, entonces diputado en el Parlamento de Galicia.
En una de las conversaciones, el empresario dice haber 'regalado' un Porsche a cambio de algunas gestiones ante el Gobierno gallego. El coche se transfirió a nombre de una familiar de Escribano, quien dijo haberlo adquirido a Duarte por 10.360 euros.
