La Consellería de Sanidade detectó en Galicia entre los años 2004 y 2008 un total de 1.025 nuevos diagnósticos de infección por el VIH y 485 casos de Sida, lo que supone un 111 por ciento más de registros de infección que de enfermedad. La progresión anual de la incidencia es bastante 'estable', aunque registra un bajón significativo entre 2007 y 2008, pasando de 34,3 casos de Sida --por año y por millón de habitantes-- a 29,8.
Así lo confirmó la conselleira de Sanidade, Pilar Farjas Abadía, que presentó este viernes, por primera vez, los datos del Sistema de Información Galego sobre la infección por VIH con motivo del Día Mundial del Sida, que se celebra el próximo 1 de diciembre de 2009.
'Con este nuevo registro, Galicia se suma al equipo de cabeza de las otras ocho comunidades que declaran actualmente en España casos de VIH', proclamó Farjas antes de recordar que, hasta el momento, los datos gallegos existentes procedían únicamente del Registro Gallego del Sida, lo que suponía 'un vacío excesivo' en la toma de decisiones de prevención.
Según detalló, entre 2004 y 2008, la incidencia de infección por VIH fue de 74 casos por año y por millón de habitantes, lo que sitúa a la comunidad gallega 'por debajo' de la incidencia anual española. Con respecto a la distribución por sexos y edades, los hombres representan el 75,7 por ciento de los VIH en Galicia.
El tramo de edad entre los 25 y 44 años en el momento del diagnóstico es el más elevado, tanto para hombres como para mujeres, y alcanza el 71 por ciento.
En la distribución por provincias, Pontevedra presenta la mayor incidencia de infección en el período analizado, con una media anual de 92 casos por millón de habitantes, seguida de A Coruña (77), Ourense (66) y Lugo, con 27 casos por millón de habitantes.
TRANSMISIÓN SEXUAL
En su intervención, la conselleira alertó de que, en el 68,3 por ciento de los casos, la infección se produjo por la vía sexual --41,7 por ciento asociado a la heterosexualidad y un 26,6 por ciento a la transmisión por relaciones homosexuales-- lo que 'rompe claramente' con la idea 'predominante' de que el contagio tenía lugar, sobre todo, por compartir material de inyección entre drogodependientes, que supone la cuarta parte de los nuevos casos registrados.
Los datos del revelan también que el 35 por ciento de los infectados presentan también una inmunosupresión 'muy alta' porque el diagnóstico es 'tardío'.
En este contexto, Farjas consideró prioritario 'promocionar' el diagnóstico precoz entre la población y en la práctica asistencial para obtener el 'máximo beneficio' de los avances en el tratamiento de la infección por VIH.
La importancia de la prevención fue otro de los puntos en los que incidió especialmente la responsable de Sanidade antes de presentar los dípticos y folletos de una campaña impulsada por la Xunta bajo el lema 'Detén a Sida. Unidos Podemos'.
AUMENTO EN LOS EXTRANJEROS
Por otra parte, Farjas resaltó que el 19 por ciento de los nuevos diagnósticos de infección por VIH se registró en personas originarias de otros países. Por ello, destacó la necesidad de 'diversificar' los programas de prevención para adaptarlos a la población inmigrante, social y culturalmente muy heterogénea, y 'especialmente vulnerable', sobre todo en el caso de las mujeres.
Sobre las categorías de transmisión, los latinoamericanos están mayoritariamente asociados a las relaciones sexuales no protegidas (en el 94 por ciento de los casos), mientras que la mayoría de extranjeros europeos se infectaron por compartir material de inyección de drogas, y los que llegaron de África, se infectaron 'casi todos' por relaciones heterosexuales no protegidas (en el 93 por ciento de los casos).
'Con este nuevo registro, Galicia se suma al equipo de cabeza de las otras ocho comunidades que declaran actualmente en España casos de VIH', proclamó Farjas antes de recordar que, hasta el momento, los datos gallegos existentes procedían únicamente del Registro Gallego del Sida, lo que suponía 'un vacío excesivo' en la toma de decisiones de prevención.
Según detalló, entre 2004 y 2008, la incidencia de infección por VIH fue de 74 casos por año y por millón de habitantes, lo que sitúa a la comunidad gallega 'por debajo' de la incidencia anual española. Con respecto a la distribución por sexos y edades, los hombres representan el 75,7 por ciento de los VIH en Galicia.
El tramo de edad entre los 25 y 44 años en el momento del diagnóstico es el más elevado, tanto para hombres como para mujeres, y alcanza el 71 por ciento.
En la distribución por provincias, Pontevedra presenta la mayor incidencia de infección en el período analizado, con una media anual de 92 casos por millón de habitantes, seguida de A Coruña (77), Ourense (66) y Lugo, con 27 casos por millón de habitantes.
TRANSMISIÓN SEXUAL
En su intervención, la conselleira alertó de que, en el 68,3 por ciento de los casos, la infección se produjo por la vía sexual --41,7 por ciento asociado a la heterosexualidad y un 26,6 por ciento a la transmisión por relaciones homosexuales-- lo que 'rompe claramente' con la idea 'predominante' de que el contagio tenía lugar, sobre todo, por compartir material de inyección entre drogodependientes, que supone la cuarta parte de los nuevos casos registrados.
Los datos del revelan también que el 35 por ciento de los infectados presentan también una inmunosupresión 'muy alta' porque el diagnóstico es 'tardío'.
En este contexto, Farjas consideró prioritario 'promocionar' el diagnóstico precoz entre la población y en la práctica asistencial para obtener el 'máximo beneficio' de los avances en el tratamiento de la infección por VIH.
La importancia de la prevención fue otro de los puntos en los que incidió especialmente la responsable de Sanidade antes de presentar los dípticos y folletos de una campaña impulsada por la Xunta bajo el lema 'Detén a Sida. Unidos Podemos'.
AUMENTO EN LOS EXTRANJEROS
Por otra parte, Farjas resaltó que el 19 por ciento de los nuevos diagnósticos de infección por VIH se registró en personas originarias de otros países. Por ello, destacó la necesidad de 'diversificar' los programas de prevención para adaptarlos a la población inmigrante, social y culturalmente muy heterogénea, y 'especialmente vulnerable', sobre todo en el caso de las mujeres.
Sobre las categorías de transmisión, los latinoamericanos están mayoritariamente asociados a las relaciones sexuales no protegidas (en el 94 por ciento de los casos), mientras que la mayoría de extranjeros europeos se infectaron por compartir material de inyección de drogas, y los que llegaron de África, se infectaron 'casi todos' por relaciones heterosexuales no protegidas (en el 93 por ciento de los casos).
