La polémica actriz ha ingresado, por quinta vez en tres años, en un centro de rehabilitación. Pero esta vez ha sido diferente, lo ha hecho de manera voluntaria. Esto no es lo único sorprendente en el comportamiento que Lindsay está teniendo últimamente, muchos de sus amigos aseguran que la actriz se está volviendo loca.
Según han informado en TMZ.com, Lindsay Lohan, de 24 años, ingresó el pasado lunes por la noche en un centro de rehabilitación al sur de California. En principio, se espera que permanezca en el centro hasta el próximo juicio que tiene como fecha el próximo 22 de octubre.
La polémica actriz ya ingresó tres veces en este tipo de clínicas durante el año 2007 tras admitir que era adicta al alcohol y las drogas y fue liberada antes de tiempo de su cuarta condena el pasado agosto.
La semana pasada pasó entre rejas tan sólo 15 horas después de dar positivo en un análisis de droga. Salió en libertad bajo fianza después de pagar la escalofriante cifra de 300.000 dólares (220.000 euros aproximadamente). Tras su liberación, está obligada a llevar un dispositivo que controle su consumo de alcohol y drogas.
A parte de esto, los amigos de la actriz están bastante preocupados porque piensan que Lohan se está volviendo majara. Al parecer, el comportamiento de Lindsay está siendo cada vez más desequilibrado. 'Casi siempre habla de ella en tercera persona, es como si estuviera completamente separada de ella misma', explican en Fox News.
'Es Lindsay Lohan la que viola las prohibiciones de drogas, no se ve a ella misma como la que está haciendo las cosas mal', añaden. Nancy B. Irwin, una psicóloga de Los Angeles, dice que dicho comportamiento siempre se da en personas que intentan deshacerse de la responsabilidad de sus acciones, lo que comúnmente se llama trastorno de la personalidad.
La polémica actriz ya ingresó tres veces en este tipo de clínicas durante el año 2007 tras admitir que era adicta al alcohol y las drogas y fue liberada antes de tiempo de su cuarta condena el pasado agosto.
La semana pasada pasó entre rejas tan sólo 15 horas después de dar positivo en un análisis de droga. Salió en libertad bajo fianza después de pagar la escalofriante cifra de 300.000 dólares (220.000 euros aproximadamente). Tras su liberación, está obligada a llevar un dispositivo que controle su consumo de alcohol y drogas.
A parte de esto, los amigos de la actriz están bastante preocupados porque piensan que Lohan se está volviendo majara. Al parecer, el comportamiento de Lindsay está siendo cada vez más desequilibrado. 'Casi siempre habla de ella en tercera persona, es como si estuviera completamente separada de ella misma', explican en Fox News.
'Es Lindsay Lohan la que viola las prohibiciones de drogas, no se ve a ella misma como la que está haciendo las cosas mal', añaden. Nancy B. Irwin, una psicóloga de Los Angeles, dice que dicho comportamiento siempre se da en personas que intentan deshacerse de la responsabilidad de sus acciones, lo que comúnmente se llama trastorno de la personalidad.
