Saludable

La decisión para comenzar, la voluntad de mantenerse

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La decisión de comenzar es importante. Pero será clave su voluntad para mantener la constancia en el gimnasio e incorporar el ejercicio entre sus hábitos.

Es frase o recurso común en deportistas, artistas o políticos aquello de que “lo difícil no es llegar a la cumbre, sino mantenerse”. Podríamos aplicar el mismo dicho para millones de ciudadanos comunes que, presa de la euforia o los efectos burbujeantes de bebidas espiritosas, juran y perjuran el 31 de diciembre que, a partir del año nuevo, cambiarán de forma radical su vida. Ya están aquí los tradicionales propósitos: dejar de fumar, aprender inglés y practicar ejercicio.

Esta santísima trinidad puede durar menos que un avemaría, cuando nuestras promesas electorales no se ajustan a la realidad de nuestra vida o a las peculiaridades de nuestra personalidad. Por mi parte, pretendo aconsejarles sobre el propósito ‘Ejercicio’.


El primer paso


Como reza el título de este artículo, el primer paso es decidirse. Aunque son habituales los clientes que entran en el gimnasio obligados por médico y familia (casi a punta de pistola) usted debe convencerse de, primero, la necesidad que demanda su cuerpo  y, segundo, los grandes beneficios del Ejercicio Físico.

No existe enfermedad, trastorno físico o psíquico o dolor donde el Ejercicio no ejerza un efecto beneficioso, paliativo o recuperador. La ciencia nos respalda en cada investigación. Quien lo niegue es un ignorante o quizá un influencer en las redes sociales.


Consejos para resistir


La decisión de comenzar es importante. Pero será clave su voluntad para mantener la constancia en el gimnasio e incorporar el ejercicio entre sus hábitos. 

Mi primer consejo para lograrlo es que elija el lugar donde se sienta cómodo. Un gimnasio familiar, acogedor y no intimidante, de trato personal y con profesionales titulados y experimentados.

Mi segundo consejo es que escuche a ese profesional para elegir la actividad más adecuada a sus necesidades y estado físico, previa valoración inicial.

Mi tercer consejo es que distribuya el ejercicio de forma racional, en base a su ritmo de vida. Pasar de la inactividad a tres horas diarias de machaque es un estupidez que suele durar dos semanas. Sea realista.

Mi cuarto consejo son varios. Escuche, practique y disfrute. Pronto habrá resultados. ¡Feliz Año 2020! 

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