El circuito de Montalegre, que hace un par de meses repitió como punto de partida del Campeonato del Mundo de Rallycross, fue reconocido por la Federación Internacional del Automóvil (FIA) con la certificación ambiental máxima que concede el organismo que rige el automovilismo mundial. Es la primera vez en la historia que un circuito de rallycross recibe dicha certificación y para Montalegre llega después de las actuaciones realizadas para reducir el impacto ecológico en el transcurso de la prueba del Mundial.
El circuito ya había recibido el año pasado la certificación de dos estrellas, pero la organización a cargo del Município de Montalegre y del Clube Automóvel de Vila Real reforzó su apuesta por la responsabilidad ambiental, implementando las actuaciones a un plano todavía mayor para este 2023, que se ha traducido ahora en este reconocimiento.
El Montalegre World RX of Portugal ha tomado medidas como la recogida y separación de los residuos producidos en la prueba, el uso eficiente de agua, la utilización de agua no potable para regar el circuito, la reducción en el uso de plástico y papel, el uso de coches eléctricos por la organización, entre otras, lo que le ha permitido tener a su circuito entre la élite mundial.
