El gerente del área, Félix Rubial, reiteró en la reunión motivos de "seguridad" para una medida avalada este lunes por el Colegio Médico
Embarazadas, madres, padres, abuelos, profesionales sanitarios y vecinos de Verín llenaron el salón de actos del hospital comarcal para pedir explicaciones a la gerencia del área sanitaria que, a partir del 1 de diciembre, llevará a las mujeres embarazadas de Verín a parir en Ourense por "seguridad". Las 37 gestantes ocuparon las primeras filas de una reunión que no llegó a buen término. Conocedoras de la decisión hecha pública el pasado viernes, pedían al gerente, Félix Rubial, que "fuese al grano". Las reiteradas ocasiones en las que el gerente pidió "respeto" avivó la indignación. "Respecto o que non ten vostede polas mulleres".
"¿Se responsabiliza usted de que mi hijo muera en la carretera si tengo alguna complicación?"
"Se esto segue así, terei que convocar as embarazadas individualmente", avisó Rubial, que les comunicó que la decisión está "baseada na opinión de tódalas sociedades científicas, que din que aumenta o risco para os neonatos se non hai máis de 600 partos ao ano" y les garantizó en Verín todos los servicios pre y postparto.
El gerente abandonó el hospital, una hora después, entre gritos de "dimisión". Le acompañaron los jefes de servicio de Pediatría y Ginecología y Obstetricia, Santiago Fernández Cebrián y Xosé Luis Doval.
Compromiso del Sergas
El Sergas reitera que "todos os embarazos e partos de risco veñen sendo atendidos desde a unidade de Ourense con referencia provincial desde a súa creación". Tras la drástica reducción de los nacimientos en Verín (89 el año pasado) "non se aconsella unha unidade hospitalaria, máxime cando o 80% da poboación fértil desta bisbarra vive a un máximo de 43 minutos de Ourense, onde poden ser atendidas con tódalas garantías", apuntan. El Colegio de Médicos "entiende y apoya" la decisión. Su presidente, José Luis Jiménez, ve que "es una decisión de carácter técnico y correcta, pero esperamos que sea un inicio no solo de decisiones de cierre, sino de apertura".
Rubial apuntó a las embarazadas que esta ratio tan baja (un parto cada cinco días) hace que "a experiencia dos profesionais se vaia perdendo, non é discutible e non vou consentir que ningunha muller ou neonato de Verín teñan risco". Una explicación que el jefe de ginecología del hospital comarcal, Javier Castrillo, no comparte: "Todos los que trabajamos en este servicio hemos adquirido la experiencia en hospitales con muchos más partos que en el de Ourense. Me formé en el Río Hortega de Valladolid, con 4.000 al año. La verdad es áspera y es que cuesta dinero que tengan que mantener a nuestras matronas, ginecólogos y pediatras". Castrillo añade: "Aquí hemos hecho cesáreas con urgencia y hay niños por la calle gracias a ello, que probablemente no hubieran llegado vivos a Ourense". El ginecólogo Rogelio Viñán dice: "Igual no cumplimos los criterios, pero sé que en la carretera es la peor asistencia". "Hoxe estamos todas. As mulleres de Verín, que pairan aquí. Nós decidimos", gritaron las asistentes. Este sábado, a las 17,00 horas, hay una protesta frente al hospital comarcal.
La visión de los alcaldes
El alcalde de Verín, Gerardo Seoane, anuncia que recurrirá la decisión a la Fiscalía. "Pedimos unha figura de mediador pero o xerente díxonos que non, a decisión está tomada. Ten que haber unha discriminación positiva con Verín". Pide la dimisión de Rubial. El resto de regidores de la comarca también está en contra de la decisión y buscarán alternativas. El gerente les comunicó que la medida es "irrenunciable" y lamentan que no se hubiera hecho de otra manera. "Dixeron que hai criterios técnicos, pero sentounos mal enterarnos pola prensa. Xa había unha manifestación convocada porque a cidadanía ten moito medo de que se vaia recortar no hospital, e isto unha semana antes parece que é darlles a razón. Por riba de todo, teño que defender os meus veciños; dicimos que hai que defender o rural, isto parece que só leva a matar o rural.", apuntó Luciano Rivero, alcalde de Cualedro (PP). La también popular Ana Villarino, regidora de Oímbra, con orgullo de haber sido madre dos veces en el hospital de Verín: " Non comparto a decisión, poderiamos ampliar a base, mirar cara a Portugal... Todos defendemos o noso territorio, faremos toda a presión para que non se materialice".
El alcalde de A Gudiña, José María Lago, llamó a buscar "alternativas" mientras que Rafael Pérez, regidor de A Mezquita (BNG), se opone "totalmente" al cierre del paritorio, y habla de "sangradeiro continuo". "Foi o dermatólogo, agora isto...eu son do concello máis afastado da cidade, como convenzo alguén que veña vivir a Manzalvos ou Castromil?". Pérez cree que es una decisión "puramente política, inadmisible" y anuncia que harán "moito ruído". El alcalde de Laza aseguró no haber sido invitado, mientras que su homólogo de Castrelo do Val, el socialista Vicente Gómez, no vio sentido a la reunión: "Só dixo que era irrenunciable e irrevocable, non sei para que nos chamou". Cree que se debería haber hecho de otra manera: "Se dixeran que estaban reorganizando e que había que pechar iso, pero ofrecesen ampliacións noutras especialidades... Pero a decisión foi drástica".
