Once de los 29 ciudadanos iraníes secuestrados desde el pasado diciembre en tres sucesos distintos en Siria han sido liberados, informó hoy el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Ramin Mehmanparast.
La liberación del grupo de secuestrados se ha llevado a cabo gracias a la 'colaboración de países amigos', según Mehmanparast, quien recalcó que estos secuestros no dan legitimidad a los grupos armados opuestos al régimen de Damasco que los realizan.
Estos secuestros van 'contra los Derechos Humanos y la legislación internacional', según señaló el portavoz de la diplomacia de Teherán.
Según los medios iraníes, medios turcos han informado que la liberación de estas once personas se ha obtenido con la mediación del Gobierno de Ankara.
Por su parte, el embajador de Irán en Líbano también declaró hoy que había pedido a las autoridades de Beirut que investigasen informaciones que apuntaban que algunos de los iraníes secuestrados en Siria podrían haber sido trasladados a territorio libanés.
El lunes, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Ali Akbar Salehi, dijo que los 29 ciudadanos iraníes estaban secuestrados por grupos opositores armados en Siria y se encontraban en buenas condiciones.
El 21 de diciembre pasado, siete técnicos iraníes que trabajaban en una central eléctrica en la ciudad siria de Homs fueron capturados por un grupo armado opositor sirio, que afirmó que dos de ellos eran militares, lo que Teherán desmintió.
El pasado 1 de febrero, los medios iraníes informaron de que once peregrinos iraníes habían sido secuestrados en Siria, en la carretera que une Damasco con la ciudad de Hama.
Seis días antes, el 26 de enero pasado, otros once peregrinos iraníes que viajaban en un autobús de Damasco hacia Alepo, en el norte de Siria, también fueron secuestrados.
Estos dos secuestros llevaron a las autoridades iraníes a prohibir a los peregrinos iraníes los viajes por carretera a Siria, donde sólo los autorizarán en avión.
Irán ha apoyado los levantamientos y revoluciones de la 'primavera árabe', que Teherán denomina 'despertar islámico', en Túnez, Egipto, Libia, Yemen, Bahrein, Jordania y Arabia Saudí, pero respalda firmemente al régimen sirio del presidente Bachar Al Asad, su principal aliado árabe.
Según Teherán, los levantamientos contra el régimen de Damasco están promovidos por potencias extranjeras, en especial Estados Unidos, y en ellos intervienen grupos terroristas contrarios a Al Asad.
La oposición siria ha acusado a Irán de apoyar la represión del régimen de Al Asad con armas y ayuda militar.
