Alvite, de aldea fantasma en los años 90 a refugio turístico

Con 27 inmuebles rehabilitados en los últimos años, acaban de crear una web de venta y alquiler  

Los vecinos de Alvite, en el municipio de Beariz, después de registrarse como aldea singular en el Ministerio de Turismo, continúan con su proyecto de rehabilitación integral de viviendas y espacios públicos, al mismo tiempo que persiguen atraer turismo, teniendo en cuenta que está ubicada en el Camino de Santiago y que, por sus especiales características, resulta especialmente atractiva para los visitantes. Sin embargo, ese no es el único objetivo, ya que esta comunidad vecinal aspira también a crecer, asentando nuevos residentes.

Para ello, acaban de dar un paso más y crear una web para atraer turismo y lanzar una oferta inmobiliaria con ocho viviendas a la venta, tres de ellas ya rehabilitados y acondicionadas para vivir o disponer de una segunda residencia.

En la década de los 90 del siglo pasado era un pueblo fantasma, totalmente abandonado, sin habitantes. La creación de una casa de turismo rural iniciaba el camino cara a la rehabilitación de otras casas hasta el día de hoy que suman ya un total de 27 totalmente recuperadas. La labor de la asociación de vecinos, que preside Carlos Gulías Roo, ha sido fundamental en este empeño, que ha contado también con el apoyo del Concello de Beariz.

Oferta

La oferta de venta y la rehabilitación también han obrado el milagro de aumentar en población. Carlos Gulías lo explicaba: “Hace tan solo cuatro años éramos 4 residentes y ahora somos 14. Los fines de semana se suman otros tantos y en verano son muchos más, familias enteras que residen en otros sitios y disfrutan en Alvite de las vacaciones, y algunas de ellas con varios niños”. 

Hay jubilados, otros proceden de países como México o Brasil, también los hay de Vigo y A Coruña. El mismo presidente ha estado en Francia y Madrid. Muchos de ellos han rehabilitado las casas familiares y otros han comprado propiedades en esta aldea singular que sigue creciendo en población.

Tanto los nuevos vecinos como los que tienen allí sus raíces coinciden en valorar la tranquilidad, los espectaculares paisajes, las magníficas casas recuperadas según la tipología arquitectónica tradicional de la aldea y, además, la proximidad de los servicios. En la web animan a posibles compradores apuntando que a tan solo dos kilómetros está el centro de salud, entidad bancaria, colegio, residencia de mayores, bares o tiendas, entre otros servicios necesarios para “no echar nada en falta en el rural, incluso tenemos cobertura 4G y pronto nos instalarán fibra óptica, por cuyo motivo cualquiera puede teletrabajar, cualquiera que quiera salir de la ciudad”, indica el presidente de la asociación.

Además, también señala las posibilidades de trabajo en los ámbitos agrarios, forestal y ganadero, precisamente la asociación ya dispone de 20 vacas que pastan las praderías y montes del entorno para prevenir incendios. Para ello, contaron con el apoyo económico de la Consellería de Medio Rural, que acondicionó los cierres y demás instalaciones necesarias. Los vecinos confían ahora en que la web atraiga más población.

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