El alcalde afirma que tiene autorización de Patrimonio, aunque no descarta cambiarla de lugar

Una gran marquesina en plena Praza Maior de Maside provoca el rechazo de los vecinos

La marquesina se instaló en un espacio de protección histórica.  (Foto: Martiño Pinal)
Vecinos de Maside y la oposición consideran que la instalación de una marquesina destinada a parada de autobuses en la Praza Maior causa un gran impacto visual. El alcalde afirma que la autorizó Patrimonio, aunque no descarta su reubicación.
La instalación de una marquesina en plena Praza Maior de Maside para la parada de los autobuses está suscitando un importante rechazo entre la población. La estructura de hierro y cristal tiene 11 metros de largo por cuatro de alto y los vecinos consideran que rompe totalmente con la estética de la emblemática plaza del centro del pueblo.

Al impacto visual al que se refiere una buena parte de los habitantes de la localidad y el grupo municipal del PP hay que añadir, según indicaron, que la marquesina obstaculiza el paso a las casas próximas de una ambulancia o de un camión de extinción de incendios.

Obras

‘Esto é unha salvaxada e ninguén o quere aquí na praza’, sentenciaba un grupo de vecinos observando en la mañana de ayer a los obreros que realizaban los últimos retoques para su instalación.

El portavoz de la oposición, Casimiro Campo, declaró que su grupo votó en contra de la colocación de la marquesina no sólo por romper la estética del centro sino también porque ‘consideramos que é un auténtico despilfarro gastar 95.000 euros en algo que non é necesario, xa que nestes momentos pasan por Maside tan só seis líneas de autobús diarias’.

Sin embargo, el alcalde, Celso Fernández, declaró que ‘o rechazo non é tanto como di a oposición, xa que só é por parte dos veciños da praza’. Al mismo tiempo, añadió que ‘o Concello solicitou esta estación para que poidan acollerse os usuarios dos autobuses e foi a Consellería de Infraestructuras a que a instalou e para elo tiña que contar co pertinente informe de Patrimonio’. De esta forma, justificaba el regidor la ubicación de la estructura en la plaza, teniendo en cuenta que es el lugar en el que tradicionalmente paran los autobuses y que Patrimonio lo autorizó pese a estar dentro del espacio de protección de edificios como la Casa Consistorial o la iglesia.

No obstante, Celso Fernández reconoció que posiblemente no es el lugar más idóneo y anunció que cuando concluyan las obras de los pasos elevados que cruzan la N-541 para facilitar el transito de entrada y salida al pueblo, el Concello tiene pre visto realizar una reordenación del tráfico dejando la calle principal y la paralela con sendos sentidos únicos, uno ascendente y otro descendente. Entonces, según el regidor, será el momento de estudiar la posibilidad de cambiar de sitio la marquesina, que podría reubicarse en la calle paralela a la principal.

Entre tanto, Casimiro Campo tildaba de ‘aberración’ la ubicación en la plaza y manifestaba que ‘se chego a ser alcalde, unha das primeiras cousas que farei será retirala dese lugar tan emblemático’.

Intento infructuoso de recogida de firmas

‘Para facer algo así, o Concello debería consultalo cos veciños, pero non o fixo, e a oposición tampouco fixo nada’, manifestaba un habitante de la localidad. El grupo municipal del PP había intentado recoger firmas en el pueblo para que se posicionasen los vecinos que rechazan la marquesina. Al respecto, declaró Casimiro Campo que ‘deixamos os papeis en lugares públicos e foron desaparecendo polo que non chegamos a recoller as firmas como pretendíamos’.


Te puede interesar