El retraso entre 15 y 20 minutos del transporte escolar a la hora de recoger a los alumnos en el centro de A Uceira (colegio público Calvo Sotelo) está generando una situación de riesgo para los chavales. Las numerosas quejas de los padres motivaron a la Policía Local, contando con el apoyo de Protección Civil, a realizar un control del tráfico y a identificar a conductores y empresas encargados del transporte. El acceso de los niños a los autobuses se produce mientras estos circulan y estacionan en la explanada.
La Policía Local de Carballiño, contando con el apoyo de Protección Civil, procedió ayer a identificar a los conductores y empresas del transporte escolar que realizan la línea del centro de A Uceira, perteneciente al colegio público Calvo Sotelo, a raíz de las numerosas quejas recibidas por parte de los padres sobre los retrasos de los autocares para recoger a los niños a la salida del centro educativo.
Los retrasos se producen desde el pasado lunes y los agentes constataron durante el control efectuado que se prolongan entre 15 y 20 minutos, lo que implica una larga y peligrosa espera para los niños en la explanada del colegio. La Policía Local, atendiendo a los requerimientos de los padres, identificó los cuatro autocares que deberían haber estado estacionados delante del colegio cinco minutos antes de las 14.30 horas, en que salen los alumnos, y posteriormente, a las 15.30 horas, cuando se produce la salida de los usuarios del comedor.
El jefe de la Policía Local, Francisco Valeiras, declaró que o retraso foi importante, de 15 a 20 minutos o luns e o martes, onte non foi tan significativo, pero tamén se produxo. Tanto los padres como los docentes consideran preocupante la situación de peligro para los chavales. Los autobuses llegan tarde y con prisa. Según pudieron constatar los agentes, en canto os rapaces están subindo nunhos autocares, outros están chegando e estacionando e os microbuses, que acaban antes, arrancan sin esperar a que todos os nenos abandoen a explanada.
Situación caótica
Lo que se produce es una situación un tanto caótica, con los niños en la explanada y los autocares circulando por ella. Los agentes consideran que la situación es difícil de controlar y que es necesario que la Consellería de Educación adopte inmediatas medidas correctoras.
Francisco Valeiras considera que existe un importante riesgo y espera que se corrija con urgencia. La dirección del centro ya remitió un informe a la delegación de Educación y la Policía Local lo enviará hoy, al mismo tiempo que será trasladado al alcalde de Carballiño para que tenga constancia de los hechos.
Farase unha inspección
Según constató la Policía Local de Carballiño, el retraso se debe a que los mismos autobuses tienen que realizar otras líneas escolares en el entorno y a los conductores les resulta difícil cumplir con los horarios establecidos.
Además del grave problema de seguridad, tal y como lo calificaron los agentes, los padres también se quejan de que los niños llegan fatigados a casa a la hora de comer.
El delegado Territorial de la Xunta, Rogelio Martínez, declaraba ayer que no tenía constancia de la situación. Aseguró que haberá que ver o informe da dirección do centro e buscaranse solucións. El delegado también anunció que se llevará a cabo una inspección, e o que sea resolverase sen problema.
Inicialmente, aunque sin haber visto el referido informe, Rogelio Martínez puntualizó que supoño que haberá que reaxustar os horarios dos autobuses.
La Policía Local prevé realizar hoy un nuevo control, ante el temor de un posible atropello, y teniendo en cuenta que ya han ocurrido accidentes de este tipo en otros lugares de Galicia. Por ese motivo, a la espera de que la Consellería de Educación tome cartas en el asunto, los agentes continuarán realizando una labor preventiva para evitar accidentes.
Los retrasos se producen desde el pasado lunes y los agentes constataron durante el control efectuado que se prolongan entre 15 y 20 minutos, lo que implica una larga y peligrosa espera para los niños en la explanada del colegio. La Policía Local, atendiendo a los requerimientos de los padres, identificó los cuatro autocares que deberían haber estado estacionados delante del colegio cinco minutos antes de las 14.30 horas, en que salen los alumnos, y posteriormente, a las 15.30 horas, cuando se produce la salida de los usuarios del comedor.
El jefe de la Policía Local, Francisco Valeiras, declaró que o retraso foi importante, de 15 a 20 minutos o luns e o martes, onte non foi tan significativo, pero tamén se produxo. Tanto los padres como los docentes consideran preocupante la situación de peligro para los chavales. Los autobuses llegan tarde y con prisa. Según pudieron constatar los agentes, en canto os rapaces están subindo nunhos autocares, outros están chegando e estacionando e os microbuses, que acaban antes, arrancan sin esperar a que todos os nenos abandoen a explanada.
Situación caótica
Lo que se produce es una situación un tanto caótica, con los niños en la explanada y los autocares circulando por ella. Los agentes consideran que la situación es difícil de controlar y que es necesario que la Consellería de Educación adopte inmediatas medidas correctoras.
Francisco Valeiras considera que existe un importante riesgo y espera que se corrija con urgencia. La dirección del centro ya remitió un informe a la delegación de Educación y la Policía Local lo enviará hoy, al mismo tiempo que será trasladado al alcalde de Carballiño para que tenga constancia de los hechos.
Farase unha inspección
Según constató la Policía Local de Carballiño, el retraso se debe a que los mismos autobuses tienen que realizar otras líneas escolares en el entorno y a los conductores les resulta difícil cumplir con los horarios establecidos.
Además del grave problema de seguridad, tal y como lo calificaron los agentes, los padres también se quejan de que los niños llegan fatigados a casa a la hora de comer.
El delegado Territorial de la Xunta, Rogelio Martínez, declaraba ayer que no tenía constancia de la situación. Aseguró que haberá que ver o informe da dirección do centro e buscaranse solucións. El delegado también anunció que se llevará a cabo una inspección, e o que sea resolverase sen problema.
Inicialmente, aunque sin haber visto el referido informe, Rogelio Martínez puntualizó que supoño que haberá que reaxustar os horarios dos autobuses.
La Policía Local prevé realizar hoy un nuevo control, ante el temor de un posible atropello, y teniendo en cuenta que ya han ocurrido accidentes de este tipo en otros lugares de Galicia. Por ese motivo, a la espera de que la Consellería de Educación tome cartas en el asunto, los agentes continuarán realizando una labor preventiva para evitar accidentes.
