El alcalde de Castrelo de Miño y representantes de la asociación para la defensa ambiental de las Ribeiras do Miño se desplazaron ayer hasta Santiago de Compostela para presentar nuevas alegaciones en contra de la apertura de una cantera en este municipio.
En total registraron 276 alegaciones ante la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, suscritas por vecinos, el propio Concello y la asociación. En este caso reclaman que el proyecto se someta a la evaluación ambiental estratégica, después de haber presentado hace meses también un buen número de alegaciones contra el plan sectorial de incidencia supramunicipal.
El alcalde de Castrelo, Xurxo Rodríguez, criticó el hecho de que la Consellería de Medio Ambiente someta a consulta la necesidad de la evaluación estratégica entre los días 10 y 30 del mes de agosto, cuando es una época en la que los concellos disponen de poco personal y para muchos es periodo vacacional. 'As cuestións ambientais hai que estudialas a fondo e non ocultalas', declaró el regidor.
Las alegaciones vuelven a incidir en los perjuicios que ocasionaría la cantera en la producción vitivinícola, en el patrimonio arqueológico y etnográfico, en los manantiales, también en el ámbito turístico y, sobre todo, en el medio ambiente, además insisten en que se pretende realizar la explotación en una zona de especial interés agrario.
Los responsables de la empresa no han querido hacer declaraciones y se han limitado a afirmar que 'seguimos cumpliendo la ley'.
El alcalde de Castrelo, Xurxo Rodríguez, criticó el hecho de que la Consellería de Medio Ambiente someta a consulta la necesidad de la evaluación estratégica entre los días 10 y 30 del mes de agosto, cuando es una época en la que los concellos disponen de poco personal y para muchos es periodo vacacional. 'As cuestións ambientais hai que estudialas a fondo e non ocultalas', declaró el regidor.
Las alegaciones vuelven a incidir en los perjuicios que ocasionaría la cantera en la producción vitivinícola, en el patrimonio arqueológico y etnográfico, en los manantiales, también en el ámbito turístico y, sobre todo, en el medio ambiente, además insisten en que se pretende realizar la explotación en una zona de especial interés agrario.
Los responsables de la empresa no han querido hacer declaraciones y se han limitado a afirmar que 'seguimos cumpliendo la ley'.
