Las fuerzas de seguridad los controla después de detenerlos al menos cinco veces en cuatro años
El 60% de los robos que se registran en la provincia (602 en el 2018, de los que 94 fueron con violencia e intimidación) fueron ejecutados por las mismas personas, delincuentes fichados con numerosos antecedentes, según los datos que manejan Policía Nacional y la Guardia Civil.
Los agentes tienen "fichadas" a 90 personas. Pusieron el foco sobre ellos al ser detenidos en más de cinco ocasiones por delitos contra el patrimonio en los últimos cuatro años. Y son a los primeros a los que recurren nada más tener conocimiento, ser denunciado un robo. "En el 60% de los casos encontramos pistas. Fueron ellos o saben algo, conocen a los ladrones", afirmaron fuentes del Cuerpo Nacional de Policía.
Este mismo argumento se esgrime en la Guardia Civil, puntualizando que son robos de "escaso valor": sustraen dinero, herramientas, maquinaria, teléfonos y material informático, entre otros objetos. "El botín suelen venderlo para conseguir dinero rápido", añaden fuentes del Instituto Armado, que incluso ya tiene delincuentes fichados en cada comarca. "Hay ocasiones que nada más comprobar el modus operandi, la forma en que se ejecuto el robo, ya sabes quién pudo ser, por donde tirar para practicar la detención", añaden.
La mayor parte de los robos atribuidos a los mismos delincuentes suelen registrarse forzando ventanas y puertas. Armando González tiene una vivienda en Allariz, en la que los delincuentes entraron en dos ocasiones en menos de un año. "Se llevaron ropa, menaje de cocina, herramientas y objetos decorativos", afirma.
La Guardia Civil abrió una investigación, que llevó a la detención de un vecino de la villa, al que atribuyeron medio centenar de robos en el municipio en menos de un año. "Recuperaron parte del botín, pero hay cosas que ya las había vendido", añadió la víctima.
Bandas itinerantes
La Policía Nacional y Guardia Civil atribuyen un 40% de los robos que se registran en la provincia a bandas itinerantes y ladrones expertos. En este caso, el botín suele "ser cuantioso" y los autores no suelen dejar pistas que permitan identificarlos, obligando a los agentes a realizar una inspección ocular para encontrar huellas, que una vez analizadas, pueden esclarecer el robo, aunque puede llevar años.
Gasóleo, cables de cobre y material de hierro y aluminio
Tanto la Guardia Civil como el Cuerpo Nacional de Policía no detectaron un repunte de la delincuencia ni de robos en el último en la provincia. Los primeros observaron en los últimos seis meses un "ligero incremento" en sustracciones de gasóleo, herramientas, material de cobre, hierro y aluminio. Los agentes establecieron un amplio servicio de vigilancia, deteniendo a finales del pasado mes de marzo a dos ciudadanos lusos, ambos con múltiples antecedentes por este tipo de asaltos en el país vecino. "Nada más analizar la forma en que ejecutaron algunos robos en Portugal, los datos ya no pusieron sobre su pista", apuntaron fuentes del Instituto Armado. Pero no fueron los únicos detenidos. Los agentes esclarecieron en menos de tres días otro robo de cables de cobre en el municipio de San Amaro, deteniendo a tres personas en Carballiño.
Los agentes tienen en la actualidad cinco investigaciones abiertas para esclarecer robos de material de cobre y aluminio (ventanas y puertas de viviendas vacías) en Pereiro, Paderne de Allariz, Esgos, Barbadás y Xinzo.
