La AG-53 (Ourense-Dozón) parece condenada a no contar con un área de servicio a la altura de Maside. El segundo intento lanzado por la Xunta para construir una instalación con gasolinera, tienda o cafetería, entre otras cosas, ha resultado también fallido, al no suscitar el interés de ninguna empresa para construirla y gestionarla. Todo ello pese a que el Gobierno gallego redujo la magnitud del proyecto, dado que pasó de requerirse una inversión de 4,5 millones a una de tres.
Los pliegos elaborados fijaban una concesión de 35 años para explotar el área de servicio, que daría servicio a los vehículos en ambos sentidos de circulación, y pretendían la creación de hasta siete puestos de trabajo. El canon anual que debería abonar la adjudicataria se fijó en 50.000 euros.
Además de gasolinera, de tienda y cafetería (con aseos, vestuarios, almacén y oficina), se proyectaban tres puntos de recarga de vehículos eléctricos y un equipo de suministro de agua y aire. Además, habría 30 plazas de aparcamiento y una zona de juegos para niños.
La zona seguirá, por tanto, únicamente con la urbanización realizada consistente en carriles de aceleración y desaceleración y una glorieta para el cambio de sentido, pero sin un servicio añadido para los usuarios.
